La plazoleta que fue obsequiada por un sacerdote

Forma parte de la Manzana Jesuítica, y cuenta con una interesante historia que involucra al presbítero Ignacio Duarte y Quirós. Se trata de la plazoleta Jesuítica, ubicada frente a la iglesia de la Compañía de Jesús, en calle Obispo Trejo, esquina Caseros. En 1650, el sacerdote compró a Clara de Castañeda una casa y su correspondiente terreno, propiedades que en 1667 decidió donar a los jesuitas, junto a otros bienes, como el primer edificio donde funcionó el Colegio Monserrat y la Estancia de Caroya. 

Pero la donación fue con una condición, que el lote sea usado exclusivamente como plazoleta de la iglesia de la Compañía de Jesús. En cuanto a la casa, los jesuitas la emplearon como beaterio, y las beatas que vivían allí atendían a las mujeres que participaban de los ejercicios espirituales. En 1776, casi una década después de la expulsión de los jesuitas (1767), ambas propiedades fueron vendidas. La casa pasó a manos de un particular, en tanto que la plazoleta pasó a ser propiedad del Estado municipal.

Tras el regreso de los jesuitas a Córdoba, Augusta Montaño, viuda de Rafael García, el primer decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Córdoba, solicitó colocar una estatua de su difunto marido en la plazoleta, argumentando que la misma era muy grande para ubicarla frente a la tumba y tapaba la sepultura. Fue autorizada y el monumento permaneció en el lugar hasta que el 15 de agosto de 1918 fue vandalizada: un grupo de estudiantes que se manifestaba en el marco de las protestas por la Reforma Universitaria derrumbó la estatua en símbolo de protesta, ya que consideraban a García como un "tradicionalista". El monumento fue repuesto y mantenido en el lugar hasta mayo de 2005, cuando fue retirado tras una serie de refacciones. Actualmente se conserva en el interior de la Facultad de Derecho.