El otro triángulo de hierro de Milei: inflación, actividad y desempleo

10.000 son los empleados estatales que el gobierno anunció esta mañana que quiere jubilar anticipadamente. Algunos ya han llegado a la edad jubilatoria y tienen el derecho de quedarse trabajando unos años más, pero el gobierno los quiere jubilar ahora. Este anuncio busca continuar con la reducción de personal. Hace apenas 24 horas, el gobierno comunicó el despido de 3.000 empleados, muchos de ellos con sueldos altos, como parte de un programa de ajuste en el sector público, especialmente en áreas contratadas del estado.

Este ajuste forma parte de lo que el ministro Sturzenegger ha denominado "la deep motosierra". El gobierno necesita seguir reduciendo el gasto, ya que la primera etapa del ajuste no es suficiente para mantener el superávit fiscal. La política de ajuste en el Estado, como repitió esta mañana el presidente Javier Milei, continuará. No es un proceso que se detenga en una etapa específica.

Los otros dos datos, 5 y -3,5, son las proyecciones de crecimiento. El Fondo Monetario Internacional estima una recesión en Argentina, con una caída de la actividad del -3,5. Esto contrasta con el crecimiento que han tenido la mayoría de las economías de la región, destacando a Brasil, que este año crecerá un 5%. Sin embargo, el Fondo pronostica que el año que viene habrá un crecimiento del 5% en Argentina, lo que podría interpretarse como un rebote tras años de recesión económica. Este crecimiento es una buena noticia para el gobierno.

No obstante, el equipo económico de Luis Caputo, que aún se encuentra en Estados Unidos, recibe con preocupación la proyección del Fondo, de una inflación del 45% para el próximo año. El gobierno promete una inflación más baja, pero este pronóstico, aunque alto en comparación con niveles internacionales, representa una disminución significativa respecto a la inflación que se espera para este año, que superará el 120%.

Este triángulo de datos económicos es crucial para el próximo año. La inflación ya está bajando, pero debe disminuir aún más. La actividad económica es fundamental, ya que sin un aumento en esta área, Milei no podrá regenerar expectativas políticas que sostengan su plan económico. Por último, la preocupación sobre el desempleo se intensifica. Los despidos en el sector público y privado, provocados por la recesión, generan un clima de incertidumbre. Aunque el crecimiento del 5% es alentador, puede ser desigual, afectando a sectores que aún enfrentarán recesión y reducción de personal.

Este es un dato social relevante que ya se refleja en las encuestas, donde el desempleo y la crisis social se posicionan como las principales preocupaciones, superando a la inflación. La situación actual requiere atención y medidas efectivas para enfrentar los desafíos que se presentan.