Máximo Kirchner eligió aislarse

-Ocurrió ayer a la madrugada un hecho político significativo: la reunificación del centro político en la Argentina a través de un proyecto de ley que unió al peronismo clásico con Juntos por el Cambio.

-La oposición y una parte del oficialismo eligieron un consenso importante que le evitara al país un costo mucho más grave del que debería pagar si hubiéramos ido al default. Esto, no quiere decir que la situación económica vaya a mejorar inmediatamente, sino que no va a empeorar como hubiese empeorado si nos quedábamos afuera del mundo.

-Fuera de ese acuerdo quedaron los extremos políticos de la Argentina: la nueva derecha conservadora liberal (de Javier Milei), la ultra izquierda, que además de votar en contra trató de destruir el frente del Congreso, incluyendo, paradójicamente, el despacho de la vicepresidenta de la Nación.

-Máximo Kirchner, el jefe de La Cámpora, eligió esconderse. No fue a la sesión si no hasta el último minuto para ir a votar en contra. Es todo lo que hizo. No estuvo en ningún momento y eligió esconderse y apostar al fracaso del acuerdo con el Fondo y el fracaso del consenso político de las fuerzas mayoritarias.

-Máximo y Cristina quedaron ahora a un costado. Eligieron tomar distancia del Gobierno, del consenso con la oposición para tratar de dentro de un tiempo, demostrar que tenían razón.

-Sería deseable que todos los políticos que tienen que ver mucho con los problemas gravísimos que tiene la Argentina especulen en términos positivos y no en términos negativos.