Abrapalabra
03/10/2024 | 17:08
Redacción Cadena 3
Julio Perotti
Audios
Cómo financiar adecuadamente la educación, el desafío central
Este miércoles salió a la calle por segunda vez la comunidad universitaria para reclamar por los fondos que le asignó por ley el Congreso y que el gobierno de Javier Milei decidió vetar para mantener el déficit cero.
Esto forma parte, claramente, de una problemática mucho más global y siempre vigente: la defensa de la educación pública, a partir de recursos apropiados.
Argentinos por la Educación presentó días atrás el informe “Evolución del financiamiento educativo”, que muestra cómo fue la inversión en educación entre 1980 y 2022, cuánto aportan al financiamiento la Nación y las provincias, y cómo se reparten los fondos entre los distintos niveles educativos.
Estos son los puntos centrales del informe:
Entre 1980 y 2022, el Estado aumentó la inversión en educación en términos reales y como porcentaje del PBI, aunque la tendencia se está revirtiendo a partir de 2015.
La inversión que realizan las provincias aumentó un 292%, mientras que la inversión de Nación creció un 30%.
El aumento se distribuyó de manera desigual: fue mayor para la educación superior (226%) que para las escuelas (163%).
Desde 2006, la ley establece que es obligación invertir un 6% del PBI en educación, pero esta meta se cumplió en 2009, 2013 (incluyendo Ciencia y Tecnología) y en 2015 (exclusivo para educación)
El siguiente es el diálogo que mantuvimos con la autora del informe es la economista Leyre Saenz Guillen, del observatorio de Argentinos por la Educación.
Cuando ustedes encararon el estudio sobre el financiamiento educativo, ¿con qué expectativas iban y con qué se encontraron?
En este último informe que hicimos desde Argentinos por la Educación, junto a Alejandro Morduchovich (economista y justamente especialista en tema de financiamiento educativo), analizamos lo que sería la serie histórica de los últimos 42 años en el financiamiento educativo en Argentina. Lo que vemos es que viene aumentando en la serie histórica, en la serie total, en estos últimos 40 años.
Sin embargo, acá dos cosas importantes a destacar. A partir del 2015, vemos que esta tendencia está empezando a revertirse.
Está bajando todo lo que es el financiamiento en el nivel superior y en el nivel básico, en todos los niveles de educación que contamos en el país.
Por otro lado, el otro dato importante que vemos en el informe, es que desde el 2006 en Argentina contamos con un marco normativo: hay que invertir un 6% del PBI anual a educación, y sin embargo, desde que está esta ley hace 18 años, únicamente se cumplió en tres ocasiones, en el 2009, 2013 y 2015.
Esto actualmente nos deja una deuda total igual a una partida presupuestaria completa de educación. Es como para que si tuviésemos que saldar esta deuda, tuviéramos que invertir en un año un 12% en vez de un 6% del PBI . Evidentemente esto muestra que hay una deficiente financiación.
¿Cuáles consideran ustedes que son los aspectos más afectados en todo el proceso educativo?
Primero es importante mencionar que el financiamiento es una condición necesaria: sin financiamiento es muy difícil tener margen de maniobra para después hacer políticas educativas de calidad.
¿Cómo se distribuye el financiamiento educativo en la Argentina?
Aquí, 9 de cada 10 pesos es destinado a salario docente, y ya sabemos las condiciones laborales de los docentes y que el salario docente es bajo. Para dar un número concreto, 30% de los docentes en Argentina trabajan en más de una escuela y esto es 3 veces por encima del promedio de la región y, a su vezs también un 14% de los docentes trabajan en algún otro trabajo remunerado. Esto es el doble del promedio de la región. (2:43) Entonces, ¿cómo nos deja esto parado? 9 de cada 10 pesos va a salario docente; sin embargo, tenemos estas estadísticas que muestran que el salario y las condiciones laborales docentes hay que mejorarlas. Pero nos queda un único peso para todo lo demás. Esto implica políticas educativas para mejorar la calidad en los primeros años, (toda la parte de infraestructura, lo que sería formación docente… Entonces realmente el margen que queda para poder mejorar es muy chico y es muy difícil de esta manera lograr mejorar la calidad de los aprendizajes.
En Argentina actualmente, en tercer grado de la primaria, que son chicos de 8 años, solo uno de cada dos comprende un texto básico. O sea, la mitad de los chicos de tercer grado no comprende lo que lee. Esto muestra la urgencia de invertir en políticas de alfabetización y políticas de primera infancia para poder revertir después esta brecha, que lógicamente se acentúa tanto en el secundario como en los niveles superiores.
Cuando ustedes comparan con lo que ocurre en otros países desarrollados, donde obviamente hay una fuerte apuesta a la educación, ¿qué proporcionalidad hay respecto de salarios con el resto de la inversión que se debe hacer?
Nosotros tenemos datos de la región, como podría ser Chile, Uruguay, Brasil, todos los países limítrofes. Lo que vemos es que la relación en términos salario con lo que invierten en educación, es más bien una relación de 5 o 6 pesos a salario docente y el resto a políticas educativas, lo cual obviamente deja una maniobra y un lugar mucho mayor para poder hacer otro tipo de políticas.
Esto también explica en parte que cuando nosotros comparamos nuestros números encómo nos van las pruebas estandarizadas, de lengua, de matemática, en comparación con los países de la región, vemos que Argentina está muy por debajo de lo que rinden países que son parecidos a nosotros en términos económicos, ¿no? Y, sin embargo, Argentina está rindiendo de manera muy similar a países como El Salvador, Nicaragua, Guatemala, que en términos de nivel socioeconómico de vida, de la economía y de la sociedad, son distintos a nosotros.
Sin embargo, Chile, Uruguay, Brasil rinden por encima de Argentina y son países mucho más similares al nuestro.
Garantizar el financiamiento, obviamente una condición sine qua non (para que el sistema funcione, pero ¿qué otras medidas deberían implementarse desde el Estado para garantizar que todo funcione mucho más armoniosamente?
Acá hay varios puntos importantes, ¿no? En primer lugar, esto que mencionaba de que actualmente uno de cada dos chicos de tercer grado no comprende lo que lee.
Esto muestra la urgencia de destinar políticas y destinar financiamiento a los primeros años. A raíz de este dato, desde Argentinos por la Educación realizamos una campaña por alfabetización en la que logramos que 18 de los gobernadores del país y también el presidente Javier Milei firmaran un compromiso por la alfabetización.
Y actualmente esto se concretó en julio de este año, salieron 24 planes de alfabetización jurisdiccionales y un plan nacional.
Desde Argentinos por la Educación, siempre decimos que lo que no se mide, no se mejora. Y cuando uno mide y sabe dónde están las mayores deficiencias, es más fácil hacer políticas educativas de calidad. Y por otro lado todo el tema de las condiciones laborales del docente, que es el que está todos los días con el chico, y que impacta obviamente en la calidad del aprendizaje.
Si las condiciones laborales son bajas, como mencionaba al principio, que un 30% de los docentes trabaj4n más de una escuela, que esto es el triple de la región, esto genera mayor rotación, ¿no? El docente busca escuelas con mejores condiciones, entonces aumenta la rotación. Y esto hace que un chico, en vez de tener un docente al año,) tiene dos, tres, hasta cuatro docentes. Entonces hay que ver cómo mejorar estos incentivos salariales, incentivos de carrera docente, para que haya mayor estabilidad, que esto acompañe el aprendizaje de los chicos.
¿Es muy grande la brecha que hay entre educación pública y educación privada en la Argentina?
Cuando vemos aprendizajes, muchas veces lo que está detrás de la educación pública y la educación privada son los niveles socioeconómicos de los chicos que atienden a cada sector de gestión.
Cuando vemos que a la escuela privada le va mejor que a la escuela estatal en Argentina, lo que está viéndose reflejado en mayor medida en ese caso son los niveles socioeconómicos de los chicos que acceden a las escuelas privadas, que lógicamente son de los sectores más favorecidos del país.
Y además, en Argentina un 70% de lo que es educación básica es educación estatal, ¿no? O sea, la mayor parte de nuestro país es educación estatal. Y cuando vemos privadas, ¿cuánto tenemos? Vemos que la gran parte es privada subvencionada y nos deja más o menos un 7% de escuela privada-privado. O sea, realmente es algo muy chico.
Sin embargo, cuando vemos los aprendizajes, sí es verdad que la privada se ve que tiene mejores resultados, pero es más un tema de esta correlación del nivel socioeconómico que hay de fondo.
La escuela no está logrando cerrar esta brecha que el chico trae de la casa, que más que una diferencia del sector de gestión en sí mismo.
/Inicio Código Embebido/
Mirá también
Marcha universitaria
/Fin Código Embebido/
/Inicio Código Embebido/
Mirá también
Foro Nacional de Educación
/Fin Código Embebido/
Te puede Interesar
Diputados
Lo informaron a Cadena 3 fuentes cercanas al presidente Javier Milei, al considerar que "es un aumento ilegal y sin fondos estipulados para tal gasto".