¿La Orden de Mayo sólo por cumplir con una obligación?

El sol del 25 viene asomando…

Ya comienza a vislumbrarse la firma del Pacto de Mayo en Córdoba.

Como originalmente estaba previsto, el Gobierno nacional de Javier Milei trabaja para lograr el mayor consenso posible para la Ley de Bases en el Senado y pulir, así, la lista de invitados a poner su rúbrica en el documento de 10 puntos.

Este mediodía, Sergio Suppo nos contaba en su columna las distintas alternativas que se barajan para la ceremonia.

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Pero también nos hemos enterado que el Gobierno está pensando condecorar a los gobernadores que acompañen con la Orden de Mayo,.

¿Qué es la Orden de Mayo?

La Orden de Mayo nació como Orden al Mérito por decreto Nº 8506/46 de 1946, bajo el gobierno de Juan Perón

Es la segunda orden otorgada por el Estado argentino porque antes, en 1943, había sido creada la Orden del Libertador San Martín.

En 1957 la reglamentación de las dos órdenes fueron modificados y la Orden al Mérito pasó a llamarse Orden de Mayo, para diferenciarse de las muchas órdenes homónimas que otorgan otros Estados.

En ese momento bajo el gobierno militar de Pedro Eugenio Aramburu, se determinó:

“Créase la "Orden de Mayo" cuya condecoración será otorgada exclusivamente a los ciudadanos civiles y militares extranjeros que se hayan distinguido por sus servicios y obras personales y merezcan la gratitud de la Nación”.

O sea, extranjeros.

Más adelante, se estableció que sólo podían recibirla mandatarios democráticos.

Y, de hecho, el gobierno de Alberto Fernández retiró las condecoraciones de la Orden de Mayo y de la Orden del Libertador San Martín a Augusto Pinochet, el dictador chileno.

¿Sabían que la Orden de Mayo tiene, como las órdenes y logias, un Gran Maestre, que es el propio Presidente?

Más allá de la historia y las anécdotas, no vamos a desconocer la vocación que puedan tener gobernadores y figuras que firmen el pacto. Pero entregar tamaña distinción por cumplir una obligación, ¿no será demasiado?

Porque en verdad el Pacto de Mayo contiene cuestiones que deberían ser básicas para cualquiera que gobierne. Es decir, su obligación es cumplir con esos puntos como razón de Estado.