Un pollo por tantas gallinas

¿Para qué lado va el Gobierno? Veamos algunos datos de la realidad.

Un anuncio que es bien valorado. El ministro de Economía Sergio Massa anticipó que habrá un proceso de recompra de la deuda externa argentina por más de 1.000 millones de dólares. ¿Para qué? Para devolver al país a un lugar de participación en el mercado de capitales.

Decimos que es potencialmente positiva, porque esto puede permitir la llegada de recursos y de inversiones para el sector público y privado.

Lo que no queda claro es con qué fondos de recompra la deuda si está trabada la importación de insumos.

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Pero en paralelo, hay otros hechos que directamente siembran inquietud.

Si la medida que anunció Massa ayuda, lo que pasa con los controles de precios a empresas que el Gobierno entregó al gremio de los camioneros y a piqueteros, constituye una sombra sobre la seguridad jurídica.

La Federación Argentina de Supermercados anticipó que sus socios podrían bajarse del programa "Precios Justos".

¿Quién puede querer venir a invertir en un comercio a riesgo de que una patota quiera controlarte?

Otro aspecto que echa sombras es el pedido de juicio político a la Corte. Si Massa quiere quedar bien con el FMI y los grandes capitales con base en Estados Unidos, debe haber leído con preocupación que el Departamento de Estado haya pedido a todos los actores políticos argentinos "respetar las instituciones democráticas y la separación de poderes"

Y la tercera que no ayuda a las buenas relaciones con las democracias occidentales es la visita los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, de Cuba, Miguel Díaz Canel, y de Nicaragua, Daniel Ortega, invitados por el Gobierno argentino a participar el próximo 24 de enero de la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

¿Cuál es el verdadero rostro del Gobierno argentino ante el mundo? ¿El del pollo o de las gallinas?