Anticipan una estrepitosa caída de la oferta ganadera

En diálogo con El Campo Hoy, el productor, industrial y comerciante de carne Carlos Kohn, destacó que después de las elecciones hubo un aumento de precios en el MAG que de alguna forma era esperable.

El mercado venía en una situación tensa, subía la hacienda, se retraía el consumo y volvía a bajar, porque había más oferta en los feed lots, principal abastecedor de carne para el consumo interno.

Hasta octubre había una oferta importante por la sequía y para reserva de valor. Y ahora los corrales empezaron a vaciarse aunque todavía no hay una escasez profunda, hay una disparada de los costos por las intervenciones del gobierno en el dólar maíz, el dólar soja, "también por una escasez que ya veníamos alertando. Vamos a tener en la próxima zafra hasta febrero marzo de 800 mil a un millón de terneros menos", advirtió.

De carne somos

Según explicó, ya se empieza a sentir que hay escasez de terneros, y para los argentinos, comprar carne, con un salario de 200 dólares se hace difícil, pero la gente sigue haciendo lo posible para seguir consumiendo carne (48Kg).

Los feed lots están en situación de quebranto, por los costos de los insumos y los commodities. Va a ser muy difícil que siga subiendo en términos importantes. Ya se vio un amesetamiento de precios

Pasa que todos los eslabones intentan recuperar los márgenes de rentabilidad. Las bocas de expendio tuvieron subas de costos muy importantes, y eso es muy difícil no trasladarlo al público.

En este sentido, opinó que las perspectivas indican que los precios se van a seguir acomodando hasta fin de año (que en teoría aumenta el consumo por las fiestas).

 El escenario será muy complicado a partir de febrero marzo, porque ahí vamos a tener una estrepitosa caída de la oferta.

Lo que viene

Kohn cree que todavía hay incertidumbre respecto a la política ganadera concreta. El posible secretario de Agricultura hasta ahora no ha dicho nada en ese sentido. 

"La verdad que algún gobierno podría hacer un plan estratégico para la ganadería, para poder generar y capturar valor, producir más kilos por hectárea y llegar con mejores cortes a la población y poder exportar".

"No sabemos si se van a promover las exportaciones de forma estratégica para que los productores se animen a exportar más y generar mercados dejando cortes en el mercado interno a precios accesibles, pero eso nace de un plan estratégico, no solo unificando el tipo de cambio".

Demanda global 

El productor está convencido que el mercado externo demanda novillos más pesados, y el 60 % de los cortes le quedan al mercado interno a precios accesibles. "Es un círculo virtuoso poder exportar, pero hay que desarrollar un plan".

Eso implica producir más kilos en las mismas hectáreas, cambiar el paradigma de producción y comercialización. 

Un novillo bien criado de 400 a 450 kilos es la misma o mejor carne que un novillito que pesa la mitad y genera más valor en toda la cadena.

"En eso soy contundente: eso será mucho más beneficioso en el mediano y largo plazo para el consumidor y el productor. De eso se trata, generar más valor, más kilos por hectárea, beneficiando a la cadena y en particular a las dos puntas: el productor y el consumidor argentino, nuestro principal cliente, que nos apalanca para poder salir al mundo".