Colegio de Agrimensores
17/09/2020 | 20:40 | Desde el organismo trabajan en la vinculación digital entre los distintos ministerios para facilitar y agilizar el trabajo de sus matriculados.
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Desde el Colegio de Agrimensores de la provincia de Córdoba, Néstor Simonín dialogó con Felipe Agusti acerca del mercado inmobiliario y las recientes gestiones realizadas desde del colegio.
Aunque Simonín aseguró que "empezó a haber algo de movimiento" en el mercado inmobiliario, advirtió que no es el habitual. "Estamos viendo transferencias entre familiares o por cuestiones hereditarias, no tanto por compraventa de estos inmuebles", aseguró.
Asimismo, indicó que uno de los principales motivos por los que se encuentran paralizadas las transacciones es la falta de un valor de referencia del dólar, y en el caso del inmueble urbano, la falta de créditos es otro de los motivos.
Colegio de Agrimensores
El agrimensor destacó que los trabajos en digitalización realizados en la provincia de Córdoba, principalmente en la Dirección de Catastro y el Registro General, fueron de gran utilidad para que los matriculados puedan continuar presentando expedientes.
También recordó la firma de un convenio con el Ministerio de Finanzas para la previsación de expedientes, "lo cual da un tiempo cierto de finalización una vez que los expedientes entran a catastro. Eso ha estado funcionando muy bien", explicó.
Por otro lado, trabajan en facilitar la interacción entre los matriculados, los organismos y ministerios no digitalizados en sus tareas, "lo cual se ha hecho engorroso en estos últimos meses cuando han empezado a entrar trabajos nuevos, que no se pueden cumplimentar", lamentó.
En cuanto a avances concretos, confirmó que la Dirección Nacional de Vialidad hace 15 días implementó la digitalización de los expedientes. Además, el colegio recibe expedientes enviados por sus matriculados del interior para trasladarlos al Centro Cívico, donde los diferentes ministerios aún no digitalizados pueden retirarlos.
Verificación de estado parcelario
Por último, Simonín se refirió a la importancia de una aplicación plena de la Ley Nacional de Catastro N° 26209.
Explicó que cuando se realiza una transferencia de un inmueble urbano o rural, la Dirección General de Catastro emite un certificado con la descripción del lote, que utiliza el escribano para la transferencia.
"Ese certificado está basado en planos de hace 50, 60 o 70 años, la información no suele ser cierta y entramos en una nebulosa de inseguridad jurídica. Lo que garantiza esta ley es la seguridad jurídica en la transacción de inmuebles", remarcó.
"La ley provincial establece un plazo de aplicación plena de 5 años. Van 3 años y medio y tendríamos que tener por lo menos el 65 o 70 por ciento de la verificación. Hoy no tenemos ni el 5 o 10 por ciento", concluyó Néstor Simonín.
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