Turismo en Argentina
26/01/2022 | 08:21 | Se trata de Sagrada Cocina, un proyecto gastronómico que está emplazado en una casona de 1890. Tiene varios espacios con propuestas bien diferentes. El lugar tiene una historia de misterio.
Por Carola Cinto
Una histórica e imponente mansión se abre paso en medio de Chacras de Coria. La calle que conduce hasta este lugar no parece ser la antesala de lo que espera a cada uno de los comensales que llega hasta Sagrada Cocina.
La casona tiene más de 100 años y se mantiene prácticamente impoluta. Los trabajos de restauración fueron mínimos, ya que está muy bien conservada. Una vez adentro, el visitante se podrá encontrar con varias piezas del mobiliario de la familia que solía habitar la mansión.
"Es una casa de 1890 perteneciente a Noema Vaca. Ella era la poderosa de este lugar. Se casa pero no pudo tener hijos. Le gustaba organizar eventos y traer gente de afuera. Era muy empática con la gente que trabajaba con ella", dijo a Descubrí Sabores Julieta Perea, encargada del lugar.
Noema era muy quisquillosa. Según cuenta la historia, la casona está inspirada en el Palacio de Versalles de Francia. La reja que rodea el lugar fue modificada tres veces por la propia dueña. Luego de su fallecimiento, la casa estuvo más de 70 años cerrada hasta que los chefs Lucas Bustos y Nacho Molina decidieron llevar adelante un proyecto gastronómico.
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El proyecto gastronómico
Sagrada Cocina abrió sus puertas en octubre de 2021 y hoy es furor entre las personas que se acercan a conocerlo. La propuesta gastronómica consiste en tres espacios diferentes: el egipcio, a donde se sirve comida asiática de la mano de Nacho Molina; el salón principal, a donde se puede disfrutar de comida de fuegos de la mano de Lucas Bustos; y el bar que tiene una fusión de ambas.
El lugar tiene espacio para 70 cubiertos y para ingresar es necesario tener una reserva previa. Si bien el lugar es imponente de noche, también puede visitarse de día y disfrutar de su parque.
Una leyenda urbana
Si bien los mendocinos conocen parte de la historia de este lugar, hay muchas leyendas que rondan en torno a la figura de la familia que construyó la casa. Uno de los relatos más difundidos es que el primer esposo de Noema Vaca se suicidó de un disparo de escopeta en uno de los salones.
"Miguel Aguinaga era abogado y decidió quitarse la vida durante una fiesta que se celebró en la mansión. Él era una persona muy depresiva", contó Julieta Perea.
Según su propio testimonio, la casa sigue estando habitada por Noema que se pasea por los pasillos. "Ella está todo el tiempo acá: se pasea y come en el comedor de siempre", agregó. Julieta cuenta que, desde muy pequeña, tiene visiones y eso hace que perciba las presencias en la casa.
Sagrada Cocina no solo es una propuesta gastronómica imperdible en Mendoza, sino también la oportunidad de conocer un patrimonio único de la ciudad y de disfrutar una experiencia que aborda al visitante desde todos sus sentidos.
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