Vacaciones de invierno: dos aldeas medievales para conocer con los más chicos

Con el inicio del invierno, es inevitable pensar en las vacaciones de julio y los planes para hacer con los más pequeños de la familia. 

A continuación, dos aldeas medievales que se encuentran en la provincia de Buenos Aires y son un plan ideal para hacer en el día.

1. Campanópolis

Parece una aldea salida de un cuento: se trata de un lugar, ubicado en González Catán, que recrea una aldea medieval en un predio de unas 200 hectáreas. Está formada por construcciones, calles de adoquines, estrechos pasajes y rincones secretos que proponen un viaje a la Edad Media,

Fue construida en la década del '80 por Antonio Campana, un empresario argentino. Este lugar fue utilizado como escenografía por múltiples producciones argentinas. Incluso, la propia banda Maná lo usó como escenario para uno de sus videoclips.

En una visita, se pueden recorrer: las Doce Casitas del Bosque, fuentes, lagos, puentes de quebracho, las islas, muelles, un molino de viento holandés, una capilla colonial, una locomotora con vagones y un museo histórico.

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Para conocer Campanópolis, se deben sacar las entradas previamente aquí, porque en el lugar no hay venta de entradas. 

Se hacen visitas guiadas particulares, para grupos de jubilados para grupos de estudiantes. En el caso de las visitas guiadas particulares, se realizan todos los días en dos turnos: por la mañana de 9 a 13 y por la tarde de 13 a 17. La entrada tiene un costo de $4.000 para público general. Jubilados abonan $2.000 y niños menores de 2 años y personas con certificado de discapacidad ingresan gratis.

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2. Castelforte

Villa Castelforte es un castillo ubicado en el centro de Adrogué, partido de Almirante Brown, a una hora en auto de la Ciudad de Buenos Aires.

El edificio, construido en 1874 por el ingeniero italiano José Canale, tomó como inspiración un palacio bizantino del siglo XIII ubicado en la antigua Villa italiana Castelforte, su ciudad natal. El resultado es un castillo de estilo italiano que actualmente puede visitarse.

Inicialmente, el castillo estaba rodeado de un parque y caminos arbolados, en un predio donde también había una capilla, un refugio y un polvorín. Sus túneles conectaban la Iglesia, la Municipalidad, la comisaría y la estación de trenes. 

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Cuando su propietario murió en l883 y su viuda lo vendió para regresar a Italia junto a sus hijos, el terreno pasó por distintas manos hasta que finalmente se loteó en parcelas. En 1890 se reconstruyó y hoy se destacan elementos como las amplias galerías, los ventanales y los pisos de madera y cerámica originales.

Sin dudas, su principal atractivo son los misteriosos túneles que recrean las catacumbas del palacio original. En las visitas guiadas, se puede recorrer uno de ellos. 

Castelforte funciona como sede y museo de la Asociación Nativos de Almirante Brown, una asociación de vecinos que trabaja para preservar el acervo histórico del distrito. En una visita al lugar se puede descubrir la historia de la zona y distintos elementos que componen el patrimonio local. Para conocerlo se debe hacer una reserva al mail: nativoscastelforte@gmail.com o bien al teléfono 1151747423. La entrada es un bono contribución para el sostenimiento del lugar.

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