Diego Martínez renunció a Huracán y suena cada vez más fuerte en Boca

El entrenador argentino Diego Martínez se desvinculó de la dirección técnica de Huracán, luego de presentar la renuncia en una reunión con la dirigencia del club. 

Pese a cumplir con el objetivo de salvar al equipo del descenso, y haber asumido el pasado julio, el técnico de 45 años tomó la decisión de dar un paso al costado y se lo comunicó al presidente del club, David Garzón, y al secretario deportivo, Daniel Vega, en una reunión entre las partes.

"El Globo" fue el encargado de informar sobre la noticia en su cuenta de Twitter, en un posteo en donde señaló que "luego de una extensa reunión con la dirigencia y ante la propuesta que recibió de otro club, el técnico informó su decisión de no continuar en el cargo interrumpiendo el contrato laboral que lo unía a la Institución hasta el 30 de junio de 2024." El entrenador no se pronunció aún al respecto.

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El motivo estaría relacionado con sondeos que Martínez recibió desde Boca Juniors, sin DT a cargo desde la renuncia de Miguel Almirón el pasado mes de noviembre. Esta sería la segunda vez que un entrenador del "Globo" pasa directamente al "Xeneize" luego del caso de Gustavo Alfaro en diciembre de 2018.

El ex DT de Tigre estuvo al frente del equipo en veintitrés partidos, con un balance de doce victorias, dos empates y nueve derrotas.

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En Copa Argentina, el "Globo" pasó de fase tras derrotar a Instituto (2-0) pero luego fue eliminado en cuartos de final ante Estudiantes de La Plata (1-3). El último partido del ciclo es entonces el ocurrido el pasado sábado, por los cuartos de final de la Copa de la Liga contra Platense en San Juan con empate 1-1 en tiempo reglamentario y posterior eliminación por penales.

En cuanto al futuro de Huracán, por otro lado, el entrenador Facundo Sava, de último y breve paso por Sarmiento de Junín, es del gusto de Daniel Vega, quien lo sondeó cuando estaba en Cerro Porteño, de Paraguay, antes de la llegada de Martínez, y podría ser una de las opciones, al igual que el uruguayo Gustavo Munúa, quién estuvo cerca de asumir aunque finalmente la dirigencia se decidió por Sebastián Battaglia.