Cayeron tres acusados por la balacera que se cobró la vida de Leonel

El sábado 1° de este mes, otra vez la violencia urbana iba a escribir una de sus peores páginas en Córdoba. 

Para evitar eufemismos, antes de avanzar es mejor definir a la violencia urbana: el combo de armas, narcotráfico e impunidad que se cuece en diferentes barrios.

Ciudad de Mis Sueños, uno de los barrios sociales que el entonces gobierno de José Manuel de la Sota inauguró a mediados de la primera década de este mileno, hace ya más de 15 años, forma parte del contexto en el que prolifera este tipo de violencia.

Una urbanización planeada para mudar a las familias de las villas hacia hogares con mayores comodidades estructurales, pero que con el correr del tiempo terminaron por convertirse en enclaves complicados de la geografía cordobesa. Donde la periferia no es sólo de bolsillo.

Barrios que terminaron tomados por los narcotraficantes, que hicieron de estos enclaves su propio territorio de "confort". "Acá, en Ciudad de Mis Sueños, encontrás más puntos de venta de drogas que alumnos en sexto año del secundario", fue la descripción brutal de un viejo conocedor de la zona.

No se trata de alimentar la estigmatización. Son los propios habitantes de este barrio los que más sufren esta inseguridad asociada a la violencia y el narcotráfico. Rehenes de un sistema que exuda impotencia. 

Y Leonel Sosa, un adolescente de 14 años, pagó hace menos de 15 días con su propia vida la mala suerte de no poder escapar de allí. Junto a otros chicos, ese sábado fue hasta la plaza de Ciudad de Mis Sueños, ya que un youtuber cordobés de moda estaba por grabar allí. Filmaciones que muestran, en clave burda, lo peor de los barrios de Córdoba. 

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Allí, cuando ya todo había terminado y Leonel se disponía a regresar a su casa, se desató lo peor. Otra vez, según contarían luego los propios vecinos, con una naturalidad que no deja de preocupar.

Dos bandas que ya habían discutido en un cumpleaños, volvieron a cruzarse a los tiros a la vista de todos, a plena luz de la tarde y a menos de 100 metros de la comisaría del barrio. 

Desde un auto abrieron fuego contra un grupo que estaba en una esquina, que respondió con más disparos, según se sostiene en la reconstrucción efectuada por los detectives de la división Homicidios de la Policía. Uno de los tantos balazos salió en dirección hacia la vereda por la que caminaba Leonel, que nada tenía que ver son esa disputa. Y lo mató.

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La bronca se hizo comunidad. Familiares y allegados a la víctima no tardaron en señalar a los que dispararon. Un grupo conocido de Ciudad de Mis Sueños. Y otro que había llegado de Ituzaingó, el barrio vecino. No era la primera vez que disparaban ni que hacían ostentación de estar armados. Territorios en los que impera la ley del más violento.

Hubo varias protestas para reclamar justicia. Y, al mismo tiempo, para dejar en claro que así no pueden seguir más. Que aquel Estado que alguna vez construyó esas casas de material, hoy no llega con una prevención policial eficiente. Que en la comisaría del barrio -dijeron- los propios efectivos permanecen más adentro que afuera, para protegerse de cualquier atentado.

En las últimas horas, la investigación que lidera el fiscal Tomás Casas avanzó con tres detenciones. Las fuentes consultadas por Cadena 3 identificaron a los capturados como Manuel Ezequiel "Willy" Amaya (39), Emiliano "Tumba" Ferreyra (26) y Agustín Ariel "Turi" Bazán (18), domiciliados en Ciudad de Mis Sueños y en Ituzaingó. 

Ahora, el fiscal se encuentra analizando todo lo recolectado en los allanamientos para determinar la participación de cada uno de ellos en el crimen de Leonel. Para los investigadores, aún falta identificar a más sospechosos.