Doble golpe comando en un country de Córdoba: se llevaron un botín millonario

Un grupo de delincuentes "profesionales" ejecutó un doble asalto simultáneo en un barrio cerrado de la zona sur de la ciudad de Córdoba. La víctima fue un conocido comerciante, al que le llevaron un millonario botín entre pesos y dólares. Para ejecutar el golpe comando, los ladrones simularon ser policías.

De acuerdo a lo que informaron fuentes policiales a Cadena 3, el llamativo episodio de inseguridad se produjo alrededor de las 23 de este miércoles en el barrio cerrado La Delfina, ubicado en Villa Eucarística. 

El comerciante, de 79 años, declaró que a esa hora él se encontraba en su vivienda junto a su mujer y una empleada doméstica, momento en que al menos seis ladrones armados irrumpieron por una puerta ventana que da a un patio y que no tenía colocada ninguna traba.

En un principio, los intrusos les gritaron que eran policías de la comisaría 11° y que estaban allí para ejecutar una orden judicial de allanamiento. Pero pronto mostraron sus reales intenciones. A punta de pistola, ataron a las víctimas de pies y manos, y comenzaron a exigirles que les dijeran dónde escondían el dinero.

"No eran ningunos improvisados, sino que sabían muy bien lo que estaban haciendo", apuntó uno de los informantes policiales.

Es que los delincuentes no dejaron nada librado al azar. Demostrando tener un conocimiento acabado de toda la escena, sustrajeron el sistema DVR de las cámaras de vigilancia de la vivienda. O sea, se llevaron las filmaciones en las que se los podía ver ingresando en la casa. 

Tras revolver diferentes sectores, se alzaron con 30 mil dólares y 400 mil pesos, además de los tres teléfonos celulares de las víctimas. 

Pero esto no fue todo. Mientras uno de los ladrones se quedó allí, apuntando al hombre y a las dos mujeres, los otros cinco asaltantes se dirigieron hacia una vivienda vecina, donde vive la hija del comerciante. 

La mujer de 48 años, al escuchar ruidos en la casa de sus padres, abrió la puerta del patio para asomarse a ver qué sucedía, momento en que se topó con los ladrones. A ella y a su marido los encerraron en un cuarto, mientras también comenzaron a hurgar en todos los rincones de la vivienda. De allí se llevaron 10 mil dólares, dos celulares y, al igual que en el primer domicilio, el sistema DVR de las cámaras.

Una vez que los delincuentes se retiraron, las víctimas lograron desatarse y dar aviso a la Policía. También acudió al lugar una ambulancia del servicio de emergencias 107 que asistió a los damnificados. No fue necesario que ninguno de ellos fuera trasladado a un centro de salud.

Los primeros policías en llegar al lugar constataron que el barrio cuenta con un cerco perimetral y cámaras de seguridad, pero carece de guardias privados o de servicios adicionales. En el perímetro se encontró una abertura de unos 30 por 40 centímetros por la que, según se cree, habría ingresado la banda.

El caso tiene características similares al violento asalto que un grupo comando perpetró el pasado 3 de mayo en el barrio cerrado Bosque Alegre, en la ciudad de Villa Allende. Tras golpear y reducir a un guardia, los ladrones coparon dos domicilios contiguos y se llevaron una importante suma de dinero. 

Lo primero que hicieron los asaltantes luego de reducir al guardia de seguridad, fue dirigirse a la oficina en la que estaban los monitores que reciben los registros de las cámaras de seguridad y se llevaron la CPU, el único lugar en el que se almacenaban todas las imágenes. O sea, demostraron tener un conocimiento muy acabado sobre el lugar al que fueron a concretar el doble ataque.

El caso nunca fue resuelto hasta ahora.

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