Opinión
13/04/2022 | 12:41 |
Audios
-A mí me gustaría cerrar esta Mesa de Café haciéndome responsable primero de que esta mañana, muy impactado por la noticia que nos daba Francisco, perdí la línea profesional, y dije un exabrupto, pero un exabrupto que realmente expresa los sentimientos que tenemos como sociedad frente a estos episodios.
-Estamos todos en riesgo, pero hay algunos que están más en riesgo que otros. Hay algunos que son carne de cañón, definió Borelli , representante de estos trabajadores en estaciones de servicio. Tan pronto como ocurre un hecho como este de que salen en una moto armados y van a buscar lo que normalmente buscan. Te pegan un tiro, te matan. Uno sabe y lo expresa mezclado con la angustia, el desaliento y la desesperanza.
-Lo expresa la jovencísima y reciente viuda: Buscaremos justicia, pero sabemos que después algún juez lo va a soltar porque lamentablemente se ha ido profundizando en la Argentina destrozada de sus valores esto de asociar pobreza con delito y delito con crimen, que eso sí es una asociación ilícita calificada.
-El garantismo pretende igualar y de esa igualdad, sacar atenuantes. Si sos pobre, necesitás; si necesitás salís a robar; si salís a robar, salís de caño y si salís de caño matás. Pero todo es culpa de otros. Lo puso en palabras el dirigente social, Juan Grabois cuando dijo si yo estuviera en esa situación, saldría de caño.
-Creo que es un crimen de odio de este ejército de delincuentes desalmados. Algunos muy marcados por la droga, que odian al gil. Odian al que trabaja. Odian al que se esfuerza. Odian al que es lo que ellos no son. Una persona honrada que trata dignamente de sostener a su mujer, a su hijo y su vida y ¿por qué lo odian? Primero dame lo que vos ganás con esfuerzo y si no me lo das y si aún te entregás y si aún no te resistís, te mato y te mato porque sos un gil.
-Se está grabando en un modo irreparable la trama destrozada de la sociedad argentina, la pérdida de valores sin retorno porque está creciendo el odio. Lo planteo como hipótesis. Estoy dispuesto a escuchar a cualquiera que me alguna otra interpretación.
Por Miguel Clariá.