Escapadas
20/08/2021 | 08:05 | Se trata de las Salinas Grandes, ubicadas al norte de la provincia. Este salar, de más de 600 mil hectáreas, se extiende por Catamarca, La Rioja y Santiago del Estero. Se recomienda visitar con guía.
Por Carola Cinto
Fotos y videos: César Lanza Castelli
Córdoba tiene miles de opciones para el turismo, tanto local como extranjero. Uno de sus destinos menos difundidos es las Salinas Grandes, ubicadas al norte de la provincia.
Este salar es un verdadero "desierto blanco" que se extiende por más de 600 mil hectáreas y que se reparte entre las provincias de Córdoba, Catamarca, La Rioja y Santiago del Estero.
En el caso de Córdoba, las Salinas ocupan unas 225 mil hectáreas y tienen varios circuitos y propuestas para recorrerlas.
Dónde quedarse
Si bien en los últimos años creció el turismo más aventurero, esta parte de la provincia no cuenta con tanta infraestructura. Para dormir, es recomendable hacerlo en San José de las Salinas, un pueblito de 662 habitantes a unos 20 minutos del salar.
/Inicio Código Embebido/
Mirá también
/Fin Código Embebido/
Allí está Las Salinas Gran Hotel, un hospedaje que cuenta con todas las comodidades para descansar y disfrutar de algún almuerzo o cena. Desde este mismo lugar, salen algunas excursiones para recorrer diferentes zonas de las Salinas, ya sea al amanecer o al atardecer.
Una zona privada
Las Salinas Gran Hotel ofrece la posibilidad de visitar la zona a donde funciona LISAL, una empresa de extracción de este material. Allí se puede observar cómo se hace esta actividad, sin depredar el sistema natural.
Este sistema consiste en armar piletones de sal y llenarlos con agua por medio de unos canales. Estos reservorios tienen un 85% de salinidad, igualando -o incluso superando- al Mar Muerto. La sal empieza a endurecerse y se extraen montañas de material que después se ponen en camiones y se trasladan.
Sin embargo, este sistema se implementó con el paso del tiempo. En 1880, se usaba otro que sí dañaba el lugar. La primera explotación extranjera -llamada La Española- sacaba los bloques de sal del medio del salar con picos y palas; y se trasladaban con carritos, llamados decauville, hasta los camiones.
Los restos de lo que solía ser La Española, pueden encontrarse en este lugar: desde partes de carritos oxidados, algunas construcciones y hasta parte de lo que solían ser las vías para trasladar el material. Un cementerio metálico en medio de un gran mar de sal.
Otra curiosidad de esta parte de las Salinas es que el sol cae justo sobre el salar y se pueden observar atardeceres únicos.
El Retumbadero
Otra de las zonas que se pueden visitar es El Retumbadero, que es de acceso público. Está ubicada a 20 km de San José de las Salinas y tiene una particularidad: todavía se pueden observar restos de un pedazo de vía por la que se transportaban los decauville.
En este lugar, el sol sale del otro lado del salar, justo detrás de la única estructura que queda en pie de la vieja mina de extracción que funcionaba en el lugar.
Uno de los momentos más especiales es cuando sale el sol y todo el cielo va cambiando de colores de un minuto a otro. En los alrededores, se pueden ver familias que todavía viven de cosechar sal y que llegan hasta este lugar para llenar sus bolsas y venderla.
La sal que se extrae no es la misma que se consume: debe pasar por varios procesos de refinamiento y limpieza antes de llegar a la mesa.
Una cuestión a tener en cuenta es que, si bien se puede llegar por medios propios, se recomienda contratar a algún guía del lugar, ya que los caminos varían de acuerdo al tiempo del año. En invierno, suelen estar bien firmes por la falta de agua y en verano suelen estar cubiertos de agua.
Quienes deseen contratar esta excursión, pueden hacerlo a través de las agencias de turismo receptivo de Córdoba o desde este catálogo de la Agencia Córdoba Turismo.
/Inicio Código Embebido/