Los famosos que se separaron en plena pandemia

Las medidas de aislamiento provocadas por la pandemia de Covid-19, cambiaron las vidas, los hábitos, las costumbres de la sociedad y las personalidades del mundo del espectáculo no fueron la excepción.

Tini Stoessel y Sebastián Yatra decidieron poner fin a su relación a mediados de mayo, con una despedida fría por videollamada.

La distancia entre la Argentina y Colombia fue demasiada, como la incertidumbre de no saber cuándo se iban a volver a ver.

El 28 de junio Marcelo Tinelli anunció en Instagram su separación de Guillermina Valdés, aunque finalmente lo suyo fue un impasse. 

El 23 de agosto, en la misma red social, Tinelli compartió una serie de imágenes con las que confirmaba la reconciliación: una botella de vino tinto y dos copas servidas, un primer plano de su boca y la de Valdés, un emoji de corazón.

Al comienzo de la cuarentena, Laurita Fernández abandonó su departamento para instalarse en el departamento de Nicolás Cabré, en Pilar.

A las dos semanas la bailarina regresó a su vivienda, y al poco tiempo blanqueó la verdad: con Cabré habían puesto un punto final en la relación. Fue por videollamada, porque “no quedaba otra manera”.

Sofía "Jujuy" Jiménez y Juan Martín Del Potro se vieron forzados a compartir el mismo techo durante el aislamiento, pero una convivencia complicada y la falta de comunicación provocaron los roces que tuvieron, según contó la joven.

Quienes tampoco pudieron sobrellevar el encierro juntos fueron Mariano Martínez y Camila Cavallo. Luego de tres años y medio de relación y una hija, el actor y la modelo decidieron ponerle punto final a su romance.

"El desgaste y las diferencias" fueron los principales motivos que los llevaron a tomar la determinación, explicó Cavallo. 

Otra de las parejas jóvenes más seguidas en las redes era la compuesta por Julián Serrano y Malena Narvay. Después cuatro años, la historia de amor llegaría a su fin en abril.

El ex participante de "Bailando por un sueño" aseguró que estaban en un impasse, pero ella fue mucho más contundente: "Cuando duele el pecho tan seguido y hay más lágrimas y perdones que risas y crecimiento juntos, es porque algo no está bien".