Paul McCartney reveló quién separó a The Beatles

En los años 70'' el mundo se enteraba de la separación de una de las bandas más influyentes en la historia musical: los integrantes de The Beatles comenzaban sus caminos en solitario. 

Diarios como Daily Mirror titulaba "Paul McCartney abandona The Beatles". De este modo, hasta hoy, el músico fue el acusado de haber desintegrado a la banda.

McCartney, en una entrevista con BBC Radio 4 confesó que el hecho de ser «el tipo que rompió con The Beatles y el bastardo que demandó a sus compañeros», es un peso con el que ha cargado toda su vida.

"Era tan frecuente oírlo que durante años casi me culpo a mí mismo (…) “Tuve que vivir con eso porque era lo que veía la gente. Todo lo que pude hacer es decir que no”. 

De este modo, el ex líder de The Beatles, contó en esa entrevista que tendrá luz el 24 de octubre cómo sucedieron realmente las cosas y quién fue el culpable de la separación de la banda. 

“Yo no instigué la separación. Ese fue nuestro Johnny(…) John entró en una habitación un día y dijo ‘me voy de los Beatles’. Y dijo: ‘Es bastante emocionante, es más bien como un divorcio’. Y entonces nos quedamos nosotros a recoger los pedazos», explicó.

Esto es un hecho real, ya que Lennon expresó en privado, y en septiembre de 1969, su intención de irse del conjunto, dada las ganas que tenía de experimentar una vida en solitario, ligada al activismo político, a la música experimental y, por supuesto, a Yoko.

En ese momento el grupo, representado en ese entonces por Allen Klein, debió guardar silencio sobre esta ruptura, al menos por unos meses, para no entorpecer los acuerdos comerciales, ni el lanzamiento de uno de sus últimos disco «Abbey Road».

“Durante unos meses tuvimos que fingir. Era raro porque todos sabíamos que era el final de The Beatles, pero no podíamos separarnos”, recordó McCartney.

Finalmente, Paul habló acerca de la demanda a la banda. Sus asesores legales le dijeron que no podía demandar a Allen Klein, el que terminó por ser representante del grupo después de Brian Epstein. McCartney no quería firmar el contrato con él, mientras sus otros tres compañeros parecían fascinados, aunque terminaron mal con Klein años después

“Tuve que pelear (para proteger el legado de The Beatles) y la única forma en que podía pelear era demandar a los otros Beatles, porque iban con Klein. Y me lo agradecieron años después", explicó Paul.