La frase lapidaria de Helmut Marko sobre el futuro de Liam Lawson en Red Bull

El futuro de Liam Lawson como piloto titular de Red Bull Racing parece estar en entredicho tras las recientes declaraciones del Dr. Helmut Marko, consultor de deportes de motor de la escudería austriaca. En una entrevista concedida a Sky Sport Fórmula 1, Marko no escatimó en críticas hacia el rendimiento del neozelandés, dejando entrever que su continuidad en el equipo no está garantizada.

"No hay ningún apoyo público para Lawson por parte de Red Bull", señala la nota de Skysportformel1, y las palabras de Marko refuerzan esta percepción. "Esto no es lo que esperábamos. Lo discutiremos con calma", afirmó el directivo, visiblemente decepcionado con la actuación de Lawson. 

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Sin embargo, no se limitó a señalar las carencias del piloto titular, sino que también destacó el potencial de otros talentos emergentes dentro de la cantera de Red Bull. "Tenemos algunos corredores entre ellos en la categoría júnior que vale la pena recomendar. Gracias a Dios estamos bien posicionados", añadió.

El contraste entre Lawson y otros pilotos de la órbita de Red Bull fue un tema recurrente en las declaraciones de Marko. En particular, el consultor elogió el desempeño de Isack Hadjar, piloto de Racing Bulls, la escudería filial de Red Bull. 

"Veamos lo positivo: Isack Hadjar, que nunca ha conducido en esta pista, está marcando tiempos increíbles en su segunda carrera y sin cometer errores. Hasta ahora, lo que ha demostrado es absolutamente fascinante", subrayó Marko, dejando claro que el joven francés está en el radar del equipo. En una metáfora que no pasó desapercibida, describió a Hadjar como "el sol" y a Lawson como "la sombra", sugiriendo una brecha significativa entre el brillo de uno y el desempeño opaco del otro.

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La posibilidad de un cambio en la alineación de pilotos fue un tema inevitable en la conversación. Cuando se le preguntó si podía descartarse una salida de Lawson de Red Bull, Marko respondió con pragmatismo: "La Fórmula 1 es un deporte competitivo. Al fin y al cabo, eso es lo que cuenta". 

Sus palabras reflejan la filosofía implacable que ha caracterizado a Red Bull bajo su dirección: los resultados mandan, y ningún piloto tiene su lugar asegurado si no cumple con las expectativas.

El caso de Lawson no es el primero en el que Marko adopta una postura crítica hacia sus pilotos. La presión constante y la exigencia de resultados inmediatos son parte del ADN de Red Bull, una escudería conocida por su enfoque implacable en la formación y selección de talentos. 

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Con Hadjar despuntando y otros nombres en la categoría júnior listos para dar el salto, el neozelandés enfrenta un momento decisivo en su carrera. Las próximas semanas serán cruciales para determinar si Lawson logra revertir la percepción de Marko y afianzarse en el equipo, o si Red Bull opta por dar un giro en su alineación, apostando por una nueva promesa.

Por ahora, el mensaje de Helmut Marko es claro: en Red Bull, el talento y el rendimiento dictan el futuro, y Liam Lawson tiene trabajo por delante si quiere asegurar su asiento en la máxima categoría del automovilismo.

La decisión que pudo haber cambiado este presente

A finales de la temporada 2024 de Fórmula 1, Liam Lawson y Franco Colapinto se encontraron en el centro de una intensa especulación sobre sus futuros dentro del ecosistema de Red Bull. Ambos pilotos, jóvenes y prometedores, estaban siendo evaluados como posibles candidatos para ocupar un asiento en Red Bull Racing, especialmente ante el rendimiento irregular de Sergio "Checo" Pérez, que había puesto en duda su continuidad en el equipo principal a pesar de tener un contrato vigente hasta 2025.

Liam Lawson, piloto neozelandés formado en la academia de Red Bull, había regresado a la competición en 2024 con Racing Bulls (anteriormente conocida como AlphaTauri o VCARB) tras la salida de Daniel Ricciardo después del Gran Premio de Singapur. En las pocas carreras que disputó, Lawson mostró un rendimiento sólido, destacándose con un noveno puesto en el Gran Premio de Estados Unidos y demostrando una actitud combativa en pista, aunque también generó controversias por sus enfrentamientos con pilotos como Fernando Alonso y el propio Pérez. Su desempeño lo posicionó como un serio contendiente para ascender al equipo principal de Red Bull.

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Por otro lado, Franco Colapinto, el joven argentino que había irrumpido en la Fórmula 1 con Williams tras reemplazar a Logan Sargeant a mitad de temporada, también captó la atención de Red Bull.

Helmut Marko, asesor de Red Bull y figura clave en las decisiones de pilotos, tuvo que sopesar estas opciones. Inicialmente, Marko elogió a Colapinto, destacando su impacto inmediato en la F1 a pesar de su limitada experiencia en categorías junior. Sin embargo, a medida que avanzaba la temporada, su preferencia por Lawson se hizo evidente. 

En declaraciones a medios como Kleine Zeitung, Marko afirmó que "Liam Lawson ha hecho mucho mejor que Colapinto", subrayando la consistencia y el potencial del neozelandés. Además, la filosofía de Red Bull de priorizar a los pilotos de su propia cantera jugó un papel determinante. Lawson, como producto de la academia Red Bull, representaba una apuesta interna y evitaba el desembolso económico que implicaría fichar a Colapinto.

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El punto de inflexión llegó tras el Gran Premio de Abu Dhabi, la última carrera de 2024. Mientras Colapinto sufrió un golpe a su reputación con un fuerte accidente en la clasificación de Las Vegas (50G contra el muro) y otro en Brasil, que dañaron su imagen de fiabilidad, Lawson mantuvo un nivel competitivo sin errores graves. 

Esto inclinó la balanza a su favor. Finalmente, Red Bull anunció que Lawson sería el compañero de Max Verstappen en 2025, reemplazando a Pérez, mientras que Isack Hadjar, otro piloto de la academia, ascendería a Racing Bulls junto a Yuki Tsunoda.

La decisión de Marko de no pagar la cláusula de Colapinto reflejó tanto una estrategia económica como una apuesta por la continuidad de su programa junior.