Los tiempos de la burocracia no son los de las personas con discapacidad

Mario Rosales, es padre de dos hijos con discapacidad. Romina la menor tiene un 90% de discapacidad y usa silla de ruedas. 

Nació hace más de 30 años con una extraña condición que le produjo una discapacidad motriz y no se maneja por sus medios. Tiene una escoleosis dorso lumbar, y se alimenta a través de un botón gástrico.

Su papá manifestó que al principio la podía asistir, pero ahora él ya tiene más de 60 años y los cuidados y traslados se complican. Sobre todo cuando la tienen que llevar al médico .

Desde hace un tiempo precisa de un comando elevador, que permitiría mejorar su calidad de vida. 

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Su obra social es el PAMI y si bien ha presentado los pedidos y ha sido atendido por los representantes en San Juan, todavía está a la espera de una respuesta concreta. 

Mario necesita saber si va a contar o no con el comando. Una herramienta que precisa desde hace tiempo y que ya está cansado de esperar, sobre todo porque sabe que los tiempos de su hija no son los mismos que los de la burocracia que lleva el trámite en la obra social.

A Mario y su esposa no les gusta recurrir a los medios, porque aseguran que han hecho todo para brindarle lo mejor a Romina, pero el comando elevador es sumamente costoso y ya no lo pueden afrontar por sus medios. Por eso es que buscan visibilizar su situación, con la esperanza de tener una respuesta más rápido.

Informe de Luis Meglioli