La guerra de Putin y la llamativa muerte de 8 empresarios rusos

El pasado jueves el ciudadano ruso Ravil Maganov cayó por la ventana de un hospital moscovita, perdiendo la vida en el instante.

Podría tratarse de un desafortunado hecho aislado, aunque una serie de datos llamaron rápidamente la atención de la prensa occidental:

1- Maganov era jefe de una de las empresas petroleras más importantes de Rusia.

2- El directivo y la compañía se habían manifestado en contra de la invasión a Ucrania.

3- Es el octavo empresario ruso fallecido en circunstancias llamativas este año, seis de ellos relacionados con las dos mayores empresas energéticas del país: Gazprom y Lukoil.

Si bien Lukoil emitió un comunicado en el que afirmó que la muerte de Maganov se produjo tras una grave enfermedad, las circunstancias que rodean el deceso no dejaron de encender las alarmas entre quienes siguen minuto a minuto lo que sucede entre Rusia y Ucrania desde el 24 de febrero.

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"Los miles de empleados de Lukoil lloran profundamente esta dolorosa pérdida y expresan sus sinceras condolencias a la familia de Ravil Maganov", reza el comunicado que emitió la compañía, según Reuters.

Algo similar tuvieron que hacer los directivos de la empresa en mayo cuando otro ejecutivo, Alexánder Subbotin, fue hallado sin vida. De acuerdo con distintos medios, el directivo supuestamente fue a ver a un chamán "en un estado de intoxicación alcohólica y de drogas severo". Su cuerpo fue encontrado en un sótano donde se realizaban "rituales vudú jamaiquinos", de acuerdo con la agencia de noticias rusa TASS.

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Postura contra la guerra

A principios de este año, Lukoil se había manifestado en contra de la guerra de Rusia en Ucrania, pidió compasión para las víctimas y el fin de la invasión, según reportó la CNN.

Leonid Shulman, exjefe de transporte de Gazprom, fue el primer empresario que murió desde febrero. La Policía rusa investiga su fallecimiento como un suicidio, luego de que se encontrara una nota en la escena, el baño de una casa de campo. Poco se conoce sobre el curso de las pesquisas.

Posteriormente, tres exedirectivos de Gazprom, la mayor empresa del país, murieron en lo que va del año, entre ellos el vicepresidente Vladislav Avayev y los altos ejecutivos Serguéi Protosenya y Alexánder Tyulakov.

Avayev fue encontrado muerto con su mujer y su hija en su apartamento de Moscú en abril. Los investigadores creen que el hombre mató a su mujer y a su hija antes de suicidarse, según publicó el diario ruso Kommersant. Nunca trascendieron los supuestos motivos de Avayev ni más detalles del hecho.

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En cuanto a Protosenya, fue hallado ahorcado junto a los cadáveres de su familia en España, y a Tyulakov lo encontraron muerto atado a una soga en el garaje de su vivienda.

Finalmente, se registraron otras dos muertes de importantes empresarios que no están relacionadas con Gazprom y Lukoil, pero que también llamaron la atención de la prensa internacional por las circunstancias y el peso de los involucrados.

Se trata de Mijaíl Watford, un multimillonario ruso de origen ucraniano dedicado al petróleo y al gas que fue encontrado ahorcado en su casa en febrero, y Vasili Melnikov, propietario de la empresa de suministros médicos MedStom. Melnikov fue hallado muerto junto a su familia, y los investigadores llegaron a la conclusión de que el empresario apuñaló a su seres queridos antes de quitarse la vida.

Hasta la fecha no se conoce más información sobre el curso de las investigaciones, algo que no sorprende debido al hermetismo de las autoridades rusas en este tipo de casos.

Mientras tanto, diversos analistas creen encontrar un vínculo entre estos decesos y las luchas intestinas y de poder que se originaron en Rusia tras la crisis energética desatada por la invasión a Ucrania.