En dos días llegaron unos 2188 inmigrantes ilegales a España. FOTO: EFE

El futbolista tenía 15 años

Soñaba con triunfar en Europa y murió en un viaje ilegal

13/11/2020 | 09:18 | Se trata de un senegalés, cuyo padre había pagado a traficantes para que lo llevarán de forma irregular en barcazas. El cuerpo del joven fue lanzado al Océano Atlántico tras su muerte.

"Doudou" jugaba al fútbol en un centro de formación en Saly, una localidad cercana a Dakar, y había zarpado en dirección a España en octubre. Según indicó una fuente cercana a la agencia AFP, el joven murió durante el viaje por problemas con la comida.

El padre de "Doudou" había pagado 250.000 francos CFA (35.000 pesos argentinos) a un traficante que lo llevaría de forma ilegal a España, donde un tercero lo recibiría y lo trasladaría a Italia para que pudiera inscribirse en una escuela de fútbol. 

/Inicio Código Embebido/

Mirá también

/Fin Código Embebido/

El progenitor “fue detenido por homicidio involuntario y complicidad con el tráfico de migrantes”, declaró la misma fuente.

El joven es uno de los tantos senegaleses que murieron en el Atlántico tras el naufragio de las barcazas en las que viajaban. 

Según indicaron las fuerzas de seguridad del país africano, durante los últimos días fueron interceptados en las costas de Senegal más de 1.500 migrantes. 

Se calcula que en un fin de semana llegaron unos 2.188 inmigrantes ilegales a España. Durante el sábado se rescataron a 1.461 personas.

Te puede Interesar

Alerta por coronavirus

La determinación comenzó hace un mes ya que las profesionales nacionales cuentan con una formación similar a las de ambos países. Ofrecen buenos sueldos y homologación de títulos.

Coronavirus en el mundo

El presidente de ese país, Pedro Sánchez, anunció el nuevo estado de alerta, que otorga poderes extraordinarios al gobierno nacional. Si bien solo regirá por 15 días, podría extenderse hasta el 9 de mayo.

#LaCadenaMásGrande

Tiene 41 años y hace 22 vive en el continente africano. Se fue con su mamá y su hijo Iñaki en 2001. Pensaba ir por un año y trabajar en España, pero el destino la ató a la tierra de los zulúes.