La Mesa de Café
22/07/2021 | 12:20 | María Belén Mignon, jueza de Familia y docente de Géneros en la UNC, celebró la ampliación de derechos para las identidades disidentes, pero remarcó que requerirá de un “proceso de transición”.
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A través de un decreto, el Gobierno oficializó este martes el acceso al DNI y al pasaporte no binario, lo que significa que se agrega una tercera categoría para distinguir el género. La misma será indicada a través de la letra “X” y alcanza a aquellas personas que no se sientan comprendidas en el binomio masculino/femenino.
En La Mesa de Café, María Belén Mignón, jueza de Familia y docente de Géneros en la Facultad de Derecho de la UNC, celebró la implementación de la medida, ya que brinda la posibilidad de ampliar derechos a identidades disidentes.
“Este decreto se enmarca en una demanda que viene llevando adelante el colectivo LGBT+, desde hace mucho tiempo”, expresó y agregó que “es un escenario complejo porque pone en jaque las clásicas identidades a las que estamos acostumbrados en base a este binomio masculino/femenino”.
En este sentido, remarcó que “nuestra sociedad esta organizada en el género y el sexo”, por lo que consideró que la implementación de este DNI traerá “un sinnúmero de consecuencias y problematizaciones”.
En primer lugar, habló de las licencias parentales, ya que se otorga un determinado tiempo según el género binario. Por otro lado, mencionó la edad jubilatoria ya que es diferente para hombres y mujeres.
Además, se refirió a las implicancias que podría tener el pasaporte no binario en caso de que la persona quiera viajar a otros países donde "todavia están en desigualdad de derechos para la mujer".
“Creo que a partir de este decreto va a tener que haber una readecuación, un proceso de transición para encontrar un punto claro”, subrayó y consideró que “mientras tanto, se podría tener en cuenta la trayectoria de la persona hasta el momento en que decidió salirse del binarismo”.
Entrevista de Miguel Clariá.