La Mesa de Café
17/07/2018 | 09:33 |
Lo dijo a Cadena 3 el director de Tránsito de Córdoba, Miguel Rizzoti. Manifestó que si no hay cartelería el conductor igual debe "respetar la ley". Destacó que "Córdoba es un modelo a seguir".
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El director de Tránsito de Córdoba, Miguel Rizzotti, dijo a Cadena 3 que la demanda de la Asociación de Defensa del Consumidor de Santiago del Estero (Adecse) por multas de exceso de velocidad en la ruta nacional 9 a la altura de Villa María de Río Seco, “no va a prosperar” porque el procedimiento de la Policía Caminera “está perfectamente ajustado a derecho”.
El titular de Adecse, Javier Alexandro, manifestó que están de acuerdo “con la prevención y el control”, pero calificó de “picardía” el operativo y denunció que “antes de llegar a Villa María no hay señalización de máximas, ni mínimas, y hay un policía que antes le avisa por la radio a otro a quien parar y a quien no”.
También cuestionó que “la ruta no está señalizada” y “está en mal estado”. “Te frenan y hacen una multa de 7.000 pesos con fines recaudatorios, un promedio de cada cinco santiagueños viajan a Córdoba y tres vuelven con multas”, se quejó.
“¿Por qué no hay cartelería de máximas y mínimas? ¿Por qué no está pintada la ruta? ¿A dónde van los fondos?”, interrogó Alexandro.
Por su parte, Rizzotti, desde Córdoba, aseguró que “toda la aparatología que tiene la provincia está certificada y la documentación a disposición de quien quiera corroborar”.
En relación a los radares garantizó que “no están escondidos” y explicó que “hay una metodología de trabajo a la hora de controlar velocidad, con un operador de tránsito que necesariamente tiene que estar con un trípode, fuera de la calzada y de la banquina, señalizado con tres conos”.
“Cuando el vehículo pasa a alta velocidad, a veces lo ve y a veces no”, advirtió.
Pese a que la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) Argentina, establece que los controles con radares de velocidad deben estar identificados siempre por un enconado de 500 a 1000 metros previos a la ubicación del mismo, con un cartel móvil que indica la presencia del operativo de control, Rizzoti dijo que en Córdoba, “no es necesario que esté avisado” y que “es el conductor quien tiene que respetar las normas y a falta de cartelería ajustarse a la ley”.
Respecto a la jurisdicción del control, el funcionario cordobés dijo que “el control de tránsito no lo ha delegado Córdoba en la Nación” y eso “tiene que ver con las autonomías de cada uno de los municipios que no delegaron su facultad de controlar el tránsito, salvo que haya una adhesión expresa a la norma”.
“Nosotros hacemos controles ajustados a derecho y la norma de detención indica que el vigía puede estar. Las foto multas sí están prohibidas en Córdoba porque era un dispositivo que tenía un tinte recaudatorio, pero la Caminera es distinta porque se rige por normas internacionales”, remarcó.
“Hay una importante diferencia de cómo infracciona Córdoba y las distintas provincias. En Córdoba se para en el lugar del hecho para hacer cesar la conducta infractora y le garantizamos el derecho de defensa a la gente porque en el mismo momento está la foto con el registro”, apuntó.
Rizzoti destacó que “Córdoba está siendo un modelo a seguir en el país” y recordó que “la actividad tiene doble finalidad porque detiene a una persona en la ruta y hace cesar la conducta infractoria”.
“Si es una ruta convencional como la 9 norte que es 110 la máxima tenemos una tolerancia de 10 más, o sea que nadie debería andar por encima de 120 kilómetros”, cerró.
Informe de Gabriel Verdoia. Entrevista de Miguel Clariá.