La otra mirada
23/06/2020 | 09:19 |
Fernando Genesir
Audios
De bares y de historias
Debido a la extensa cuarentena, y con las mesas vacías hace tres meses, la gastronomía está viviendo su peor crisis en años.
Sin distinciones de barrios o tipos de negocios, la pandemia de coronavirus arrasó con bares, bodegones y restaurantes clásicos, que no pudieron superar los efectos de la pandemia.
Pese a los intentos por seguir abiertos a través de la venta vía delivery o "take-away" (a domicilio), muchos de estos comercios debieron cerrar sus puertas.
Así, todos los días nos enteramos de una historia de muchos años que se termina.
El jueves 21 de mayo bajó sus persianas Hong Kong Style, uno de los restaurantes más famosos del Barrio Chino de Buenos Aires y considerado también uno de los mejores lugares de comida asiática en la Ciudad.
No sólo se baja una persiana. Es el final de un sueño que empezó desde muy chico cuando Lui Cheuk Hung cocinaba en su casa natal del sudeste asiático, siguió en 1976 cuando Lui emigró a la Argentina junto a su tío, hasta que puso su propio restaurante, donde cada día, salvo los miércoles, cocinaba con Lili, su mujer.
El martes pasado, y luego de 30 años de actividad, cerró El Trapiche, el histórico bodegón de Palermo, ubicado en Paraguay al 5000.
Imaginemos todo lo vivido en ese rincón porteño, que -como lo dicen sus dueños en la carta de despedida- "más que un bodegón y una esquina es todo aquello vivido juntos, todo lo compartido, todo lo comido y todo lo soñado. Un eterno amor construido en estos 30 años".
Ayer, La cadena de restaurantes La Parolaccia -especializada en cocina italiana y mediterránea- anunció el cierre de su local Casa Tua, del barrio porteño de Puerto Madero.
Días atrás se conoció la noticia que otro clásico bodegón de Palermo que no pudo sobrevivir a la cuarentena y dijo adiós para siempre en las redes sociales: El Rey del Vino, en la esquina de Juan B. Justo.
Otro símbolo: La Flor de Barracas. A la lista se suman Sottovoce, en Puerto Madero, el bar Chin Chin, en San Telmo, y los cercanos DeBar y Bar Bazul.
Ayer nos enteramos que el mítico La Biela, el emblema del barrio de Recoleta, corre riesgo de cerrar sus puertas de manera definitiva.
Ese bar, nació en 1950 y este año cumple su 70 aniversario.
Su dueño, un español que vino con apenas 15 años al país, recuerda que fue lugar de encuentro de figuras del automovilismo, como Fangio, Juan Gálvez, Froilán González o Gastón Perkins.
Pero además, durante mucho tiempo, todas las mañanas, cerca de las 11, iba Bioy Casares. Así, la mesa 20 se convirtió en algo exclusivo de él. Mesa que compartió con grandes figuras de la literatura, como Borges o hasta Cortázar.
Otro que lucha por sobrevivir es el bar Roma, ubicado en la esquina de San Luis y Tomás de Anchorena, en el corazón del Abasto.
El lugar fue centro de reunión artistas y futbolistas como Néstor “Pipo” Rossi y Omar Sívori y consiguió que lo declararan notable a sugerencia de Luis Alberto Spinetta, otro asiduo concurrente a esa esquina.
Sus dueños anteriores, dos primos asturianos de 92 y 84 años, habían tenido que tirar el guante y darse cuenta que ya no podían atenderlo. Y lo vendieron justo antes de la cuarentena.
Y así, lamentablemente muchos lugares llenos de historia, anécdotas y personajes para un cuento, para una novela, para una película.
Pero quiero terminar con una pequeña historia de un bar que no cerró.
El bar está en Mar del Plata, donde la semana pasada, propietarios de restaurantes, confiterías y cervecerías pidieron que los dejen trabajar, bajo el lema "Abrimos o cerramos".
Mar del Plata continúa en fase 4, hace 10 días que no tiene casos pero requiere al menos 21 días sin contagios de Covid-19 para avanzar a la siguiente fase, que sí contempla la gastronomía, la cultura, el deporte y las reuniones sociales.
En Mar del Plata también hay cierres definitivos, entre ellos varios nombres de peso y con varias décadas de historia en la ciudad. Por ejemplo, dos sucursales de la cadena de cafeterías la Fonte D´Oro, un clásico de Mar del Plata, que ya no volverán a abrir.
Pero por lo menos hay una excepción: y es un café tradicional, que se llama Manotas y que funciona en la Galería Luro, atendido desde 1974 por Walter, su único dueño.
La recaudación de este café bajó entre un 80 y 90%. Y con tres meses sin clientes, acumulaba una deuda de cuatro meses de alquiler y otros miles de pesos en boletas de servicios.
Angustiado frente a esta dura realidad, Walter le confió a uno de sus amigos que estaba pensando seriamente en cerrar el café para siempre.
“Ni se te ocurra me dijo, algo vamos a hacer”, le contestó Leonardo, quien en ese momento decidió que no podía quedarse de brazos cruzados y apeló a la solidaridad de sus compañeros de rubro. Pidió que cada uno pusiera 500 o 1.000 pesos para juntar unos 50.000 pesos que lo ayudara a no cerrar el bar.
La respuesta superó las expectativas de todos. Evidentemente muchos empresarios y trabajadores se identificaron con la situación de Walter. En apenas unos días recolectaron más de $120 mil.
Hace tres días, le llevaron una caja sin decirle nada. Walter se encontró con sus amigos y quedó emocionado por la sorpresa.
Y así, gracias a la solidaridad de muchos el Bar puede seguir adelante.
Los clientes seguramente extrañamos las charlas, las medialunas calientes, el diario y los partidos de fútbol que durante tanto tiempo los unieron.
Pero no nos olvidamos de esos lugares donde los dueños y los mozos son como de la familia, donde el bar es como nuestra casa, y donde todo lo allí vivido es parte de nuestra vida.
Te puede Interesar
Alerta por coronavirus
El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires insistió en que hay que endurecer el aislamiento en la zona metropolitana por 15 días. Es ante la crecida en la curva de contagios.
Análisis de la cuarentena
El periodista señaló a Cadena 3 que el ministro de Seguridad bonaerense "trabaja fervorosamente para no serlo". Opinó que la provincia de Buenos Aires no invirtió suficiente contra la pandemia.
Crisis por coronavirus
El titular del gremio en la provincia, Néstor Chavarría, dijo a Cadena 3 que más de 6.500 trabajadores del sector se quedaron sin empleo en lo que va del año.
Crisis por coronavirus
Un informe señala que la mitad de las empresas tendrá inconvenientes para afrontarlo. El vocal de la entidad, José Urtubey, destacó la moratoria.