La maldición de los arqueros

La temporada 2003/04 de la Primera B Nacional fue ganada por Instituto, el Instituto de Rezza primero y de Rivoira después, obteniendo el Apertura y superando en el mundialista cordobés a Almagro, vencedor del Clausura con gol de oro. 

El “Tricolor” ascendería después y en la Promoción, de manera inesperada, Huracán de Tres Arroyos y Argentinos Juniors arrebataron los lugares de Atlético de Rafaela y de Talleres en Primera División.

Pero no vamos a hablar de eso, sólo lo mencionamos para contextualizar lo que sucedía.

No hay registros, ni antes ni más tarde, de que un mismo equipo haya utilizado cinco arqueros en 12 fechas…. ¿Cómo? Sí… ¡Cinco arqueros en 12 fechas de un mismo torneo! Ese torneo fue el Clausura 2004; esas fechas fueron desde la 4° un 22 de febrero hasta la 16° un 17 de mayo, es decir en un lapso de 12 partidos y menos de tres meses; y ese equipo fue… Belgrano.

Los números dieron para verificar la historia y que la misma aparezca en el mismísimo Libro Guinnes de los récords

Primer acto: Pedro Marchetta era el técnico y corría la 4° fecha tras una victoria en Jujuy y dos empates seguidos. Belgrano golea en Alberdi a Almagro 4-0 pero Raúl Alejandro Sanzotti, su arquero titular va a buscar en lo alto la pelota, saltando junto a Luis Tonelotto, con tanta mala suerte que cuando cae su codo pega en el piso fracturándose el húmero.

Sanzotti hoy es director deportivo de Argentinos Juniors y cuenta que esa experiencia la tiene en cuenta a la hora de incorporar arqueros al “Bicho”, porque todos deben estar preparados. “Siempre tengo ese recaudo con los arqueros, les digo que tienen que estar preparados por si se lesiona alguno”, contó a Cadena 3.

A Sanzotti, lo reemplazó Gonzalo Ernesto Vicente, de 25 años, pero con un reciente respaldo que le daban haber sido el arquero de la Promoción frente a Quilmes en 2000 y el titular en el primer semestre de la temporada 2002/03 con Ginarte en el banco.

Segundo acto: se jugaba la 8° fecha y el clásico ante Instituto en el Estadio Córdoba. El "Celeste" venía invicto y Ricardo Rezza, técnico de "La Gloria", pendía de un hilo. Si perdía se iba. Vicente choca su pierna casi en simultáneo con la de un rival y un compañero tras un córner. ¿Resultado? Rotura de ligamento cruzado y lateral interno. 

'Fue muy extraño, inusual, un mal año para los arqueros porque todos tuvimos lesiones graves', recordó Sanzotti

Ingresó Ezequiel Fabián Pelosso, de 21 años, que termina recibiendo tres lapidarios goles (de Peralta, Raymonda y Riggio) para un 3-0 que decretó la continuidad de Rezza y puso en la cuerda floja a un Marchetta sacadísimo con los hinchas. Pelosso superó, en pleno partido, un problema en el hombro derecho.

Tercer acto: Fecha 9, un 29 de marzo, ante El Porvenir en Gerli y la aparición como titular de Marcelo Germán Montoya, de 21 años, pero con 7 partidos ya en el arco de Belgrano puesto que debutó en 2001. Montoya venía de una grave lesión, similar a la de Vicente, ocurrida en noviembre de 2003 en un clásico de Reserva ante Talleres.

En el medio, AFA le anuló a Belgrano el recurso extraordinario para pedir un arquero porque había transcurrido el 65% de la temporada. 

En la 10° jornada, en un convulsionado Alberdi, vence a la CAI con gol de Cristian Torres pero Marchetta tiene un exabrupto emocional hacia los hinchas de Belgrano, propio de alguien que recién empieza en esto: “La hinchada de Belgrano es la más cagona del fútbol argentino”.

Por supuesto, no había manera de continuar. Un día después pidió disculpas públicas aunque no podía haber marcha atrás. Y Marcelo Bonetto, quien estaba a cargo de las inferiores, se hizo cargo del barco celeste.

Cuarto acto: Bonetto debuta con un empate ante Juventud Antoniana en Salta, partido que marca también el primer partido de Matías Porcari ingresando desde el banco de suplentes, aquel de la frase “Porcari y 10 más”. Pero el dato lo aportan los arqueros: Montoya se fue expulsado y ahí mismo lo sustituye Pelosso, quien tiene su primer partido como titular en la siguiente fecha (la 12) ante Ferro en Alberdi.

Quinto acto: era la 13° fecha, en Núñez ante Defensores de Belgrano y el infortunio lo siguió acompañando ya que encima de perder, volvió a sufrir la baja de un arquero. Pelosso se exigió al cortar un centro, le metió un puñetazo a la pelota antes de que llegara Juan Martín pero chocó con él y con Norberto Testa, y cayó. ¿Conclusión? Se desgarró el isquiotibial a poco de empezar el partido.

Y Montoya volvió a las canchas en ese cotejo, jugando además ante Defensa y Justicia en Alberdi y frente a Tiro Federal en cancha de Newell’s.

Sexto acto: tras caer en Rosario, Montoya acusa fuertes dolores en el recto de la pierna operada unos meses antes. Tres semanas afuera. Creer o reventar. 

'Me toca empezar a jugar, juego unos cuantos partidos y me lesiono. Me faltaba tiempo para recuperarme completamente', admitió Montoya

Entonces el 17 de mayo por la fecha 16, a los 22 años y frente a Huracán de Tres Arroyos, hace su debut el quinto arquero del plantel: Gerardo Alexis Godoy quien fue secundado por Facundo Belbuzzi, un joven de 18 años y último arquero inscripto en AFA en la nómina del plantel profesional.

Lo de Godoy fue extraordinario porque además de asegurar su lugar, no se lesionó y mantuvo la valla invicta las últimas cuatro fechas de aquel certamen y las primeras tres del Apertura 2004.

'La verdad que estuvo bueno, yo no estaba ni en los planes por ser el quinto arquero y terminé jugando', recordó Godoy

Hubo situaciones parecidas. El 30 de enero de 1994 Gimnasia La Plata vencía a River 3-1 y se quedaba con la Copa Centenario de AFA. El “Lobo” jugó seis partidos, los primeros cinco bajo la tutela de la dupla Sbrissa – Ramacciotti y la final con Perfumo. Aunque lo más curioso es que tuvo cuatro arqueros distintos en seis cotejos y por diferentes motivos como venta, lesión o táctico atajaron Hernán Cristante, Enzo Noce, Jorge Gregorutti y Javier Lavallén.

Más acá en el tiempo, con Juan Carlos Olave como eterno guardián del arco “Pirata”, también hubo ocasiones de muchos arqueros en poco tiempo. En 2013, ‘Juanca’ no pudo estar y lo reemplazó Sebastián Blázquez. El tema fue su suplente ya que había sido operado del hombro Pablo Heredia, tercer cuidapalos de aquel plantel que además tenía prestado a Rigamonti en Sportivo Belgrano. Zielinski recurrió a Lucas Acosta, de 18 años.

Precisamente Acosta fue protagonista tras el retiro de Olave, pues Belgrano empezó la temporada 2016/17 con “Juanca” y Montoya por delante de “Locura”, quien saltó a la titularidad rápidamente porque además el club tenía prestados a Rigamonti y a Heredia. Es decir que en la segunda mitad de ese torneo, el titular fue el quinto arquero de ese plantel.

Si antes del inicio de la temporada cuando Córdoba Celeste contrata a lo mejor de la B Nacional (Cobelli, el “Bocón” Torres, Alejandro Castro, Avalos, Giampietri, Bezombe, Priotti y con Labruna de técnico), alguien le decía a los simpatizantes, a sus gerenciadores o a los mismos periodistas que el equipo iba a tener cuatro arqueros lesionados al mismo tiempo, nadie hubiese dado crédito a una expresión que asoma como un verdadero disparate.

Por eso, creer o reventar.