¡Qatar, allá vamos!

Mañana restarán 365 días exactos para la máxima cita futbolística: el Mundial de Qatar. Y así lo hará oficial “el Reloj de Cuenta Regresiva” que comenzará a correr en la ciudad de Doha. Y hacia allí va Argentina con un camino en la eliminatoria que le deja números privilegiados, un equipo consolidado, rendimientos aprobados y la certeza de que llegará a Qatar con la vara alta.

No hubo festejo en cancha porque la jornada de vértigo del martes pasado no lo posibilitó. El 0 a 0 ante Brasil dejaba satisfechos a los argentinos que hablaban de una clasificación en la próxima fecha. Acaso desconocían que la calculadora les daba una opción más para descorchar en el vestuario mismo. Como Colombia y Perú juegan entre sí en enero, uno de los dos o los dos no logrará los 12 puntos que lo separan de Argentina, que así aseguraba repechaje. Y había más: si Chile perdía tampoco tenía chances de alcanzar a los nuestros. Y así fue.

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Hace un año y tres meses empezaba la fase inicial rumbo al Mundial con un cerradísimo 1-0 a Ecuador en la Bombonera, con un gol de penal de Messi y en donde en la previa no se sabía si atajaba Armani, Andrada o Dibu Martínez. Hace un año y tres meses, nadie o pocos dábamos dos pesos por Scaloni, técnico inexperto, adjetivo acertado para alguien sin experiencia que no ocupa el lugar que ostenta a través de un proyecto inspirador desde cero, pues de hecho hasta la Copa América y aún en el medio de ese torneo dejaba dudas.

No nos olvidemos que el técnico hablaba de funcionamiento y no lo había, principalmente porque se había convertido en especialista en desarmar lo que medianamente funcionaba. De identidad hablaba y no la tenía a la hora de interpretar el juego.

Nuestra Selección no pierde desde la semifinal de la Copa América 2019 de Brasil, aquel 2 de julio y lleva 27 partidos sin caer, la mejor racha del mundo en la actualidad, y está a cuatro encuentros de igualar el récord que alcanzó el equipo de Coco Basile entre 1991 y 1993. A Scaloni y compañía le alcanzará con no perder ante Chile, Colombia, Venezuela y Ecuador durante 2022, cerrando la eliminatoria sudamericana, para llegar a 31 cotejos invicto.

Pero con un 74% de los puntos en juego, sacando 29 de 39, Scaloni ya es el segundo entrenador con mejor efectividad en eliminatorias, superando a Pekerman, Sabella, Passarella y Martino, y sólo por debajo de Bielsa que con un 79% logró la clasificación a Corea – Japón 2002, cuatro fechas antes, número que alcanzó Scaloni.

Bien. ¿Eso significa que Scaloni es el mejor? ¿Mejor que quién? A veces, el resultadismo hace decir estas y otras cosas aunque es cierto que el buen resultado deja en claro que algo se está haciendo bien.

Sí, sí. Atrás quedaron 28 años sin títulos al obtener la Copa América, el período más largo sin ganar nada porque entre 1959 y 1991 estuvo 32 años sin quedarse con la Copa América pero en el medio se alzó con dos mundiales. En esos 28 años se perdieron cinco finales.

Ganó un título, está invicto, va al Mundial… pero se puede opinar distinto porque criticar no necesariamente tiene una intención derrotista y la verdad, no eran todos creyentes desde la primera hora allá por el 7 de setiembre de 2018 ante Guatemala.

El equipo ganó 8 partidos de 13, volvió a imponerse en La Paz después de 15 años, en Montevideo después de 11 años, en Lima después de seis años y mantuvo además una interesante racha sin perder de visitante, por eliminatoria, desde marzo de 2017 cuando Bolivia le ganó 2-0. Por si fuera poco, cumplió el sexto partido consecutivo sin goles en contra y el triángulo conformado por Dibu Martínez, Cuti Romero y Otamendi no recibió goles en los 619 minutos que jugaron juntos.

El 2021 comenzó con un empate ante Chile 1-1 y siguió con un 2-2 frente a Colombia. El paréntesis en el medio entre el 13 de junio y el 9 de julio por una Copa América, debutando ante la Roja con otra igualdad en uno. Después vinieron los triunfos contra Uruguay 1-0, Paraguay 1-0 y Bolivia 4-1, en fase de grupos.

En cuartos de final la víctima fue Ecuador con un 3-0, en semifinales los penales y Dibu Martínez sacaron a los colombianos y llegó el “maracanazo”.

Esa racha positiva continuó en la eliminatoria con triunfos sobre Venezuela 3-1, Bolivia 3-0, un empate en cero contra Paraguay, victorias frente a Uruguay 3-0, Perú 1-0, Uruguay otra vez 1-0 y el empate sin goles ante Brasil, con el que se debe el partido suspendido en setiembre pasado cuando funcionarios de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria, ingresaron a la cancha para impedir que siguieran jugando Emiliano Martínez, Cuti Romero y Lo Celso, quienes procedían desde Inglaterra y deberían haber cumplido una cuarentena, desconociendo en Brasil la reglamentación vigente de Conmebol en ese momento.

Maravilloso fue el año de Leo Messi con la camiseta de la Selección, con la que jugará su cuarto mundial. Muy distinto a su actualidad en Paris Saint Germain, equipo que sufre anemia de juego con un Messi que deambula con la camiseta “30” y sólo jugó 5 cotejos de la Liga 1 pero en dos completó los 90 minutos.

Pero con la celeste y blanca campeón en Brasil; artillero de esa Copa América; líder en asistencias; superó a Pelé como máximo goleador sudamericano de selecciones; máximo anotador entre los ocho seleccionados que son campeones del mundo; máximo goleador de las eliminatorias superando a Luis Suárez; marcó su séptimo triplete con el equipo nacional tras los tres tantos a Bolivia, siendo ése el primero en el país; y en este 2021 se convirtió en el jugador con más presencias en la Selección, dejando atrás a Mascherano; y en el futbolista con más partidos en la Selección en eliminatorias, dejando detrás a Zanetti.

Eso sí. Messi no tiene necesidad de tirar tanto de la cuerda porque debe ponerse bien. La patada que recibió del defensor venezolano Adrián Martínez, no lo rompió de milagro pero le dejó huellas que después le exigió una vieja cicatriz en el isquiotibial y le sigue generando dolores en el peroné.

¿Y ahora? ¿Qué se debe hacer? ¿Jugar con los mismos? ¿Probar a otros? En 2022 sólo están los cuatro partidos de la eliminatoria y en junio un amistoso ante Italia. Muy poco por la imposibilidad de jugar ante los europeos. La temporada de fútbol en las ligas terminará en mayo o junio, casi seis meses antes del mundial. Entonces, con pocos partidos a posterior porque los futbolistas saldrán de licencia y luego volverán a sus clubes para la temporada 2022/23 que en varios países europeos cortará una semana antes del inicio de Qatar 2022, ¿cómo los juntás para llegar con más rodaje?

Más allá de bajar el nivel en los últimos dos partidos, hay una cuestión de confianza en general, la Selección está a punto ahora, en el punto de cocción justo y entonces será tarea del técnico que los jugadores mantengan este nivel. La sensación es que no hay más dudas en puestos clave porque la Copa América consolidó un 11 titular. Dibu es inamovible, Molina le ganó el puesto a Montiel, Romero sólo debe mejorar una cosa: sufrió la cuarta lesión de junio para acá, Otamendi es el complemento ideal pese a hilar fino entre guapeza y violencia, y Acuña es el “3” titular. De Paul, Paredes y Lo Celso es el trío que más jugó con Scaloni en el medio y Di María se ganó el lugar que parecía de Nico González, para formar adelante con Messi y un Lautaro al que siempre se le pedirán más goles.

¡Qatar, allá vamos!