5 de los más emblemáticos palacios y castillos de la Reina Isabel II

La Reina Isabel II falleció a los 96 años, en Balmoral, su residencia de verano en Esocia y una de sus favoritas. Dada la magnitud del patrimonio real, es difícil hacer un seguimiento de todos los palacios, mansiones y residencias.

Estas son algunas de las propiedades más célebres y emblemáticas:

1. Castillo de Balmoral

El castillo de Balmoral es un palacio situado en Aberdeenshire (Escocia, Reino Unido). Se trata del refugio estival de la familia real británica y ahora es, nada menos, la residencia en la que falleció la monarca. 

Con 20000 hectáreas de bosque, se convirtió en residencia real en 1848, cuando fue alquilado a la reina Victoria I, tatarabuela de la Reina Isabel II. Les gustó tanto la residencia a los reyes que decidieron comprarla por 30 000 libras. El príncipe consorte inició inmediatamente las obras para ampliar el castillo del siglo XV y adecuarlo a las necesidades de la monarca.

2. Palacio de Holyroodhouse

El palacio de Holyroodhouse, más conocido como palacio de Holyrood, ha servido como principal residencia de los monarcas de Escocia desde el siglo XVI. Está ubicado en el extremo de la "Milla Real" de Edimburgo, opuesto al castillo de Edimburgo.

La reina solía visitar el palacio durante la "Holyrood Week", una semana a principios de verano repleta de eventos culturales y festivos.

3. Palacio de Buckingham

Es la residencia oficial de la monarca británica en Londres. Es famoso por albergar una parte sustancial de la "Colección Real", un extraordinario conjunto de obras artísticas. 

Sólo se permiten las visitas al interior del palacio durante unas pocas semanas al año, comprendidas entre finales de julio y principios de septiembre. Además de las visitas al interior, a lo largo de todo el año se celebra el Cambio de Guardia enfrente del palacio, un acto capaz de atraer miles de visitantes.

4. Castillo de Windsor

Felipe de Edimburgo, marido de la reina y padre de los príncipes Carlos, Ana, Andrés y Eduardo, pasó en este castillo, ubicado al oeste de Londres,  la última etapa de su vida. En esta propiedad se enterró al duque de Edimburgo y también aquí será donde, desde el 19 de septiembre, descansarán para siempre los restos de Isabel II junto a los de su marido. La fortaleza de cinco hectáreas está vinculada a la realeza británica desde hace más de mil años y en él han vivido cerca de 40 monarcas.

5. Birkhall

Construida en 1715, esta mansión es propiedad e la familia real británica desde tiempos de la reina Victoria, quien la adquirió como parte del castillo de Balmoral y se la regaló a su hijo mayor, el príncipe Eduardo, como residencia de verano. 

En 2002 Birkhall pasó a manos del príncipe Carlos, que se refugia en la propiedad junto a la duquesa de Cornualles cada vez que visita Balmoral.