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07/01/2014 | 06:21 | “El Pato” está 26º. Confesó a Cadena 3 que le gustaría finalizar entre el puesto 20 y 30. Contó el suspenso que vivieron en las dunas con su copiloto, Tomi Glavic, al volar su coche en el aire.
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''El Pato'' Silva suma experiencia y sueña terminar entre los 20 mejores
El piloto chaqueño Juan Manuel Silva cumplió una destacada actuación este lunes en la segunda etapa del Rally Dakar, que unió San Luis y San Rafael, y se ubica en el vigésimo sexto puesto en la clasificación general de los autos.
En una entrevista con Cadena 3, “El Pato” Silva contó que quiere seguir “sumando experiencia” en esta competencia, pero admitió que le gustaría terminar la carrera cerca de los 20 mejores.
“Siempre el sueño es dar la vuelta, llegar al final. Luego, sería muy bueno si terminamos entre el puesto 30 y 40, y excelente, entre el 20 y 30 o cerca del 20. La realidad es que hoy me encuentro ahí, pero faltan muchísimos días”, afirmó.
Por otra parte, Silva contó un momento de suspenso que vivió en las dunas de Nihuil, junto a su navegante, Tomi "Bubba" Glavic, cuando el Mercedes en el que corren voló por el aire y quedó varios segundos sin tocar tierra.
“Era muy alta la duna y, cuando llegué a la cima, estaba muy cortada y quedamos en el aire. Eso a veces es cuestión de suerte o de largar en el momento justo. No se llegó a dar vuelta el auto, pero fue complicado”, relató.
“Cuando estábamos volando en el aire, fue un momento de un poquito de tensión. Pero después lo disfruté, porque dije: '¡Epa! ¡Estuvo buena!'. Con mi acompañante también nos reímos en ese momento, porque fue lindo. Él dijo que no sentís nada en el tujes: te quedás en el aire y tenés esa sensación de querer que rápidamente toque el piso”, agregó.
Con respecto al auto que tiene en esta edición de la carrera, un Mercedes del equipo Colcar, Silva se mostró muy conforme y expresó: “Hace tiempo que no contaba con un medio mecánico que me dé la posibilidad de no tener fallas. En Argentina no se acostumbra a trabajar para el Dakar: lo hacemos sólo en noviembre o diciembre”.
De todos modos, remarcó la capacidad humana y técnica que hay en el país: “La mano de obra es de primer nivel. Pero no se toma el Dakar como hay que hacerlo. Se debe empezar a trabajar en marzo a más tardar. Gracias a Dios, encontré un grupo que tiene esa mentalidad y llegamos bien preparados”.
Por último, contó que debería mejorar su vehículo para tener aspiraciones serias de pelear los primeros puestos el próximo año. “Para estar más adelante, a mi prototipo hay que cambiarle el motor. Yo tengo uno de 6 cilindros, de 3,5 litros, y queremos poner uno de 8 cilindros, de 6,3 litros, con potencia de más de 500 HP y 450 HP en las ruedas, que es algo ya muy importante”.