En 2008 se había reabierto el caso
11/08/2012 | 07:49 | Así lo entendió el juez federal Ariel Lijo. El asesinato del secretario general de la CGT ocurrió en 1973 y fue atribuido a la organización "Montoneros".
El juez federal Ariel Lijo archivó ayer la causa por el asesinato del secretario general de la CGT, José Ignacio Rucci, ocurrido en 1973 y atribuido a la organización "Montoneros", luego de considerar que no representó un delito de lesa humanidad y por lo tanto prescribió.
Fuentes judiciales informaron que el magistrado firmó una resolución de 123 carillas en la que resolvió archivar la investigación al considerar que no es imprescriptible.
La investigación se inició el 25 de septiembre de 1973 a raíz del homicidio del entonces líder de la CGT, quien recibió 25 balazos al salir de su casa en la avenida Avellaneda de la Capital Federal, hecho en el que también fueron heridos sus acompañantes Ramón Dionisio Rocha, Abraham Muñoz, José Antonio López y Rodolfo Francisco Díaz.
En 2008, a raíz de la insistencia de Claudia Rucci, hija del ex líder de la CGT, se reabrió la causa a la que se sumó como prueba el libro "Operación Traviata", del periodista Ceferino Reato que atribuyó el hecho a "Montoneros".
El crimen tal cual se investigó habría sido perpetrado por la organización peronista en contra de lo que denominaban la "burocracia sindical", y para el juez los perpetradores tuvieron como objeto "alterar el orden público y afectar la seguridad de la Nación".
"No obstante, las evidentes deficiencias de las etapas iniciales de la investigación han impedido establecer la materialidad concreta del hecho. En tal sentido, dicha circunstancia no sólo se vio reflejada en la pérdida de prueba trascendental para la causa sino que derivó en una confusa polarización de las actuaciones en las que simultánea y antagónicamente se intentó determinar la responsabilidad en miembros de la "Triple A" y de "Montoneros", sin haberse podido lograr dicho objetivo", sostuvo Lijo en el fallo.
No obstante, Lijo aseguró estar en "condiciones de descartar la responsabilidad de la ''Alianza Anticomunista Argentina'' en el homicidio y como contrapartida, a lo largo de la investigación se han incorporado elementos que dan cuenta de la posible responsabilidad de miembros de ''Montoneros''".
"Entre ellos, pueden destacarse diversos documentos y testimonios de los que surge que dicha organización se atribuyó la autoría del crimen y que el móvil habría sido la supuesta responsabilidad de Rucci en la conocida "Matanza de Ezeiza"", añadió.
Agregó que las pruebas "parecieran indicar que la toma de decisión del asesinato fue dispuesta por unanimidad por los siguientes miembros de la Conducción Nacional de "Montoneros", integrada por Mario Firmenich, Roberto Quieto, Marcos Osatynsky, Fernando Vaca Narvaja, Horacio Mendizábal, Roberto Perdía, Rodolfo Galimberti, Norma Esther Arrostito, María Antonia Berger y Clemente Yäger.
En su resolución, Lijo reconoció no poder "satisfacer a los familiares de José Ignacio Rucci otorgándoles una respuesta que permita conocer la verdad histórica de su asesinato".