Boudou es partidario de un fuerte intervencionismo estatal
26/06/2011 | 07:00 | Con 48 años, el ministro de Economía le permite a Cristina dar más sustento a su expectativa de que espera ser "un puente entre las nuevas y las viejas generaciones".
Amado Boudou, el elegido por la presidenta Cristina Fernández para que la acompañe en la fórmula para octubre próximo, hizo una carrera meteórica en el kirchnerismo y se consagró como hombre de confianza del núcleo duro del poder cuando ideó la estatización de las jubilaciones, que permitió hacerse de un plumazo de una caja de 100.000 millones de pesos para hacer política.
Boudou, cuya "lealtad" fue reconocida por Cristina al hacer el anuncio, no sólo fue hombre de confianza de Néstor Kirchner en sus últimos dos años de vida, sino que tras el fallecimiento del ex mandatario fue obteniendo una atención cada vez mayor de la presidenta Cristina Fernández.
Como titular de la ANSeS, le acercó en el 2008 a la Presidenta y a su esposo el plan para echar mano de los fondos de las AFJP, que permitió obtener una caja sin precedentes que fue utilizada políticamente en la instrumentación de medidas como la jubilación para unas dos millones de personas que no habían hecho aportes para acceder a ese beneficio, y la Asignación Universal por Hijo.
Muerto Kirchner, Boudou dio pruebas de lealtad que fueron muy elogiadas por Cristina, incluso ante otros miembros del Gabinete que debieron irse.
En los últimos meses, Cristina mantuvo junto a Boudou y otros pocos miembros del gobierno prolongadas tertulias en Olivos que lo insinuaron como uno de los preferidos de la mandataria.
El mes pasado, la elección de Daniel Filmus por encima de Boudou había sorprendido al interior del partido, pero con el anuncio de Cristina encontró más lógica aquella decisión, también basada en que el senador medía mejor en las encuestas que el jefe de Economía.
De gran silueta política, Boudou es elogiado por el gobernador Daniel Scioli; y por el titular de la CGT, Hugo Moyano, quien incluso lo apoyó como precandidato a jefe de Gobierno porteño, pero también por la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonanifi; el líder del partido Miles, Luis D`Elía; gobernador, intendentes y legisladores.
Con 48 años, Boudou le permite a la Presidenta dar más sustento a su expectativa de que espera ser "un puente entre las nuevas y las viejas generaciones".
Militante de la UCeDé en su juventud, e incluso egresado de la ultraliberal Universidad CEMA, Boudou trocó ideológicamente hacia el justicialismo y se mostró partidario de un fuerte intervencionismo estatal.
La propia Cristina aludió a este giro al presentarlo este sábado en Olivos: "Además de confiar en las calidades personales de Amado, sobre todo lo he valorado porque lo importante no es haber pensado siempre y tener la misma orientación toda la vida, lo importante es saber cambiar cuando el mundo cambia", señaló.
Pero también parece haber pesado en la elección el hecho de que Boudou viene recibiendo críticas fuertes desde el Grupo Clarín, declarado enemigo número uno por el kirchnerismo.
"Necesito alguien a mi lado que no le tenga miedo a las corporaciones, a los preconceptos, a lo desconocido, porque el mundo va a seguir cambiando", dijo Cristina.
Nacido en la Capital pero criado en Mar del Plata, Boudou se licenció en Economía por la Universidad Nacional de la ciudad balnearia.
Por aquellos años, el ahora candidato a vicepresidente militó en la Unión para la Apertura Universitaria (UPAU), brazo estudiantil de la Unión del Centro Democrático (Ucedé).
Ya en 1998, Boudou ingresó en Administración acional de a Seguridad Social (Anses) como analista. Tras el 2002, el ministro de Economía ingresó en la Universidad CEMA y, una vez obtenido el título de magister, se desempeñó como titular de Análisis Económico de Empresas en la misma casa de estudios.
Mientras desarrollaba sus tareas de enseñanza, Boudou mantuvo su trabajo en la Anses, donde conoció a quién sería su primer padrino político, Sergio Massa.
El por ese entonces titular de la Anses lo incluyó en su círculo chico de toma de decisiones y, cuando fue elegido jefe de Gabinete de la Nación en reemplazo de Alberto Fernández, el actual intendente de Tigre recomendó a su protegido para ocupar el puesto.
Fue así que Boudou llegó a ocupar el puesto donde encabezaría una de las decisiones más fuertes del kirchnerismo en sus cuatro años de gobierno: estatizar las AFJP.
Tras el papel rutilante que tuvo al frente de la Anses, una de las mayores cajas del Poder Ejecutivo Nacional, fue electo para reemplazar a Carlos Fernández al frente del Ministerio de Economía dela Nación.
Fue desde ese puesto que propulsó la segunda reestructuración de la deuda en los ocho años de gobierno kirchnerista y anunció que el país había finalmente salido del default declarado a fines del 2001.