Liso, un clásico santafesino y su diferencia con la cerveza

La planta de Cervecería Santa Fe es uno de los edificios más emblemáticos de la capital de esa provincia. Ubicada en pleno barrio Candioti Sur, la empresa no solo produce millones de litros de cerveza, sino que también posee atractivos para los turistas.

Una de las experiencias que ofrece es la "Casa de la Cervecería", un museo que repasa la historia de la producción de esta bebida. Allí, se puede conocer sobre las máquinas y envases utilizados a lo largo de la historia, como así también sobre la evolución de la firma en más de cien años.

El recorrido, que incluye también una visita a la planta de producción, es conducido por guías especializados. Para ello, se debe reservar turno previamente al número de teléfono (0342) 156-123666, ya que se realizan en grupo de hasta ocho personas por guía.

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En el marco del Operativo Verano, el corresponsal de Cadena 3, Matías Arrieta, visitó la planta y aprovechó también para indagar sobre el liso, la bebida que fue declarada Patrimonio Cultural de los santafesinos. 

"El liso es cerveza que no fue sometida al proceso de pasteurización. Por tal motivo es más fresca y liviana. Tiene un período de conservación de 30 días y se envasa en barriles", explicó el gerente de la cervecería, Juan Pablo Barrale.

El directivo de la empresa también anunció que en las próximas semanas reabrirá sus puertas el "Patio de la Cervecería". Se trata de pintoresco local de comidas ubicado en la vereda de enfrente a la fábrica. El dato distintivo del lugar es que la cerveza que se sirve allí proviene desde una cañería que cruza por el aire. A través del "Cervezoducto", la bebida viaja directamente desde los tanques de la planta hasta la chopera.

Informe de Matías Arrieta