Un puente natural lleno de magia y con una historia única en Mendoza

Un lugar imperdible para aquellos que visitan Mendoza es el Puente del Inca. Ubicado a 193 kilómetros de la capital, se encuentra a más de 2.700 metros sobre el nivel del mar. La historia, magia y misterio que envuelven a este lugar, lo convierten en una visita obligada. 

Se trata de una formación natural que, por su valor histórico y por la belleza del paisaje, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su coloración tan particular, que oscila entre los colores ocre, amarillo y marrón, es producto del azufre y el hierro.

El Puente está sobre el Río Cuevas y se formó en época de glaciaciones. Se destacan también las aguas termales ricas en sales y minerales, que bañan e imprimen la margen del río Cuevas.

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Juan, guía turístico de Grupo Sur, cuenta que parte de la magia de este lugar, tiene que ver con su leyenda: "El hijo de uno de los jefes incas se encontraba enfermo y sabía gracias a los aborígenes, de la existencia de aguas curativas. Querían llegar y como no podían se abrazaron formando un puente humano para que pudiera pasar. Al volverse para agradecerles, los ve a todos convertidos en piedra. Por eso este lugar se conoce como Puente del Inca", cuenta.

El tour que lleva a los turistas a conocer el Puente del Inca también tiene otras paradas. A 8 kilómetros se encuentra el Cristo Redentor, un monumento que se encuentra en la frontera entre Argentina y Chile. 

Este paseo dura 12 horas y recorre 450 kilómetros. El costo es de $11.200. Para más información se puede conectar a Grupo Sur al teléfono 2612 707199 o a Nites Travel al 2613033646.

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Informe de Celeste Benecchi.