Cómo es “Matrimillas”, la comedia romántica-tecnológica que llegó a Netflix

Por Francisco Vidal

Las “Matrimillas” son un sistema de puntos y beneficios que utilizan desde hace tiempo algunas parejas con el que suman o restan según las buenas o malas acciones que tienen en relación al otro.

Bajo esta simple premisa se estrenó en Netflix una comedia romántica protagonizada por Luisana Lopilato y Juan Minujin que se centra en un matrimonio en crisis que recurre a un innovador sistema tecnológico que controla estas actitudes.

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Belén (Lopilato) es una responsable vendedora de juguetes que está casada y tiene dos hijos con Federico (Minujin), un odontólogo bastante despistado que es un aficionado por la cocina gourmet, que prepara con algunos amigos un día a la semana.

En el medio de una vida de pareja algo estancada y con cruces por las exigencias entre sí, surge la posibilidad de someterse por 30 días a una app que controla con un reloj cómo se portan con el otro y que promete como premios ciertas libertades sin depender de la otra persona –como un viaje con amigos, algo que quiere hacer Federico y que lo lleva a aceptar sin pensar esta extraña propuesta-.

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Obviamente que esta búsqueda de conseguir puntos llevará cada uno a una obsesión, a un cariño exagerado y a divertidos momentos en los que hacen lo imposible por “ganarle” al otro a la hora de sumar.

Con algunos gags algo exagerados, “Matrimillas” consigue de todas formas lo que busca: ser una comedia de enredos entretenida, un pasatiempo que logrará una rápida identificación en los televidentes.

Bajo una premisa predecible y clásica en el género, Minujin destaca mucho por su versatilidad y convence con un papel más que sólido de un tipo que está enfocado sólo en sus cosas y a quien quizás la realidad lo obligue a cambiar.

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Pese a su guion algo obvio y subrayado –más allá de la innovadora idea del giro tecnológico- hay una tensa falsedad en la relación que divierte y garantiza al menos un buen rato. Lo peligrosa que puede ser la tecnología en nuestra manera de vincularnos y la culpa en las relaciones se trata en "Matrimillas" desde una perspectiva soft y amena.