Crece la expectativa por el estreno de la segunda parte de "El Reino"

"El Reino", la serie creada por Claudia Piñeiro y Marcelo Piñeyro, fue uno de los grandes éxitos de Netflix en 2021, circunstancia que habilitó una segunda temporada cuyo rodaje finalizó a fines de julio y que se encuentra actualmente en proceso de post producción.

La primera novedad que trae la  entrega de la serie son los nuevos personajes que se suman a la trama, de la que se desconocen aún los detalles. Tal como lo anunció la cuenta oficial de Che Netflix en Twitter, se sumarán al elenco Agustín Aristarán (Radagast), Julieta Cardinali, Diego Velázquez, Maite Lanata, Florencia Raggi y Juan Ingaramo, en papeles de los que, hasta el momento no se han brindado demasiado detalles.

"Nuestros miembros han disfrutado de "El Reino" y sus increíbles personajes, por lo que vamos a seguir indagando en este rico y complejo universo en una segunda temporada. Continuar trabajando con Claudia Piñeiro, Marcelo Piñeyro y todo el equipo nos entusiasma", dijo Francisco Ramos, VP de Contenido para Latinoamérica de Netflix, al momento de anunciar la producción de los nuevos episodios.
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Siguiendo una estrategia más o menos habitual,  no hay mucha información  acerca de la continuidad de la trama. Apenas se sabe que serán siete episodios.

Para quienes todavía no la han visto, la primera temporada se encuentra disponible en Netflix. “El Reino”, escrita por Claudia Piñeiro, cuenta la historia del pastor Emilio Vázquez Pena, candidato a vicepresidente de la República. En la ceremonia de proclamación , su  compañero de fórmula es asesinado  y Vázquez Pena (Peretti) ve la oportunidad de llegar a la presidencia.

La búsqueda del asesino comienza a dejar en evidencia  una oscura trama  en torno de la iglesia evangélica  que constituye el ámbito de influencia del pastor y de su mujer, Elena Vázquez Pena, personaje que compone Mercedes Morán y que  se reveló en la temporada inicial como la que  mueve los hilos del culto y de una familia que parece perfecta y es disfuncional.

La ficción funcionó muy bien y como suele ocurrir en casos similares, además de un buen libro y actuaciones acordes, tuvo una cuota de polémica.Fue duramente criticada por la Alianza Cristiana de las Iglesias Evangélicas de la República Argentina, que a través de un comunicado acusó a los creadores de "crear prejuicios y estereotipos" e incluso cuestionó a Piñeiro por si "militancia feminista durante el debate de la ley del aborto".