Colectivos más caros, pero menos injustos

La primicia de Ahora País de ayer, acerca de que el Gobierno nacional no aumentará los subsidios a los colectivos en el AMBA les cayó como un baldazo de agua fría a muchos.

Gobernadores, intendentes y legisladores del interior que agitaron durante un día entero la bandera de la discriminación y el privilegio a los porteños para reclamar subsidios ellos también, tuvieron que hacer mutis por el foro.

Y los empresarios y sindicalistas de colectivos del Gran Buenos Aires, que habían comenzado a soñar con que podrían volver a darse aumentos salariales y márgenes de ganancia entre ellos total todo se pagaría con más subsidios bancados por el resto del país, como en las épocas de gloria del kirchnerismo, se encontraron con que no saben cómo se van a pagar la cuenta del mes.

Tal vez el gobierno pensó en subir los subsidios. Y por eso demoró dos días en desmentirlo. Ayer, en Ahora País, el secretario de Transporte, Franco Mogetta, ratificó que Milei y Caputo volvieron a izar la bandera del “No hay más plata”.

Es que la consigna vuelve a ser pura verdad. En julio, por primera vez desde enero, el gobierno volvió a entrar en déficit financiero. Todavía recauda más de lo que gasta. Pero cuando se agrega el pago de intereses de deudas, el resultado da rojo. 

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Por un lado, la recaudación del IVA y de Ganancias creció menos que la inflación por la recesión (también porque Ganancias a los salarios sigue sin cobrarse, a diferencia del año pasado a esta altura). Por el otro se gastó más por los aguinaldos, deudas concentradas en julio y energía). Lo cierto es que Milei y Caputo volvieron a sentarse sobre la caja.

Lo bueno es que se sigue eliminando la grotesca discriminación que durante décadas privilegió a los colectivos del AMBA. Pese a que Milei eliminó por completo los subsidios al interior y sólo redujo los subsidios al AMBA. ¿Por qué? Porque reducir la montaña gigante que lo privilegiaba es mucho más plata que eliminar la lomita que recibía el interior. 

Por eso, desde que asumió Milei en diciembre el boleto aumentó mucho más en Gran Buenos Aires que en el interior. En noviembre el boleto mínimo del AMBA no llegaba a 53 pesos. Ahora subirá a 370 pesos, una disparada de 598%. 

En Rosario o Córdoba en noviembre el boleto era de 240 pesos; ahora se va a 940, una suba de 291%. Con lo que un rosarino viajaba una vez en noviembre, un porteño viajaba cuatro veces y media. 

En agosto, con lo que un rosarino viaja una vez, un porteño viajará dos veces y media. Se achicó la brecha entre el interior y el AMBA. Se achicó la desigualdad. Y como se dejó de emitir, entre otras cosas para dejar de pagar esos subsidios, viene bajando el impuesto inflacionario. 

Conclusión: la gente del interior que ni siquiera tiene servicio de transporte paga un poquito menos del impuesto inflacionario que pagaba para que en el AMBA viajaran gratis.

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