Política esquina Economía
26/09/2024 | 14:19
Redacción Cadena 3
Adrián Simioni
Audios
Milei a lo bonzo: no pierde oportunidad para incendiarse
El presidente Milei no para de abusar del poder discursivo que le da su centralidad política. Como le pasaba a Cristina, se habla encima. Es lamentable. Encima, no lo hace en su propio beneficio, sino en su propio perjuicio.
Porque sus deditos teclean sobre la pantalla de Twitter, muchas veces, a una velocidad muy superior a la de su cerebro.
Acabamos de tener una muestra olímpica. Su paso por Córdoba, para interiorizarse de cerca con la catástrofe de los incendios forestales, era meritoria. El tipo venía cansado, agotado probablemente, de un viaje del exterior pero aterrizó en Buenos Aires, se cambió la ropa y partió de nuevo a Córdoba. Bien por él.
Ya que estaba acá hubiera podido podido bajar del helicóptero y darles una palabra de aliento a muchos bomberos que lo estaban esperando. La Casa Rosada todavía no explicó si fue por razones de seguridad o falta de empatía o una carencia de comprensión de que a veces los demás esperan un gesto de reconocimiento. Incluso eso podría tener un costado positivo: Milei se niega a hacer cumplir los rituales demagógicos y tribuneros a los que se dedican a full muchísimos políticos tradicionales que no sirven para otra cosa. O a la hipocresía de un Alberto Fernández que mientras posaba, todo sentimentaloide, como el verdugo del patriarcado, maltrataba a su pareja. Ponele que dejamos pasar que no bajara del helicóptero.
Ahora: volver a Buenos Aires, después de haber estado en Córdoba, para ponerse a retuitear posteos encima anónimos o de los propios trolls de Santiago Caputo culpando a “los kukas”, al kirchnerismo, de provocar el infierno en Córdoba es lisa y llana estupidez.
El tipo no pasó por Córdoba, donde absolutamente a nadie se le ocurrió ni siquiera sugerir que los incendios puedan haber tenido motivación política de ningún tipo. Adjudicárselos a “los K” es algo completamente descabellado, que juega con la honra de las personas. Constituye un desprecio profundo por la verdad.
Y ahí es donde Milei se incendia a sí mismo. Uno de los valores que Milei trasunta hacia quienes lo aprecian es que parece una persona transparente, intelectualmente honesta. Al punto de que a veces parece carecer de los frenos inhibitorios que a todos nos impide decir las cosas en su forma más cruda para tratar de cuidar las formas, de no herir a nadie al cuete.
Pero estas cosas ponen en tela de juicio su honestidad intelectual. Como cuando dijo que los ingresos de los jubilados “están volando”. Uno puede decir que en dólares los ingresos de los jubilados han subido o que en los últimos meses le ganaron por un cachito a la inflación. Los números fríos muestran que es verdad. Pero no puede decir que las jubilaciones “están volando”.
Milei, el presidente sin diputados, sin senadores, sin gobernadores, sin intendentes, sin jueces, con las peores corporaciones del país en contra, tiene muy pocas cosas en su caja de herramientas. Una de las pocas es su credibilidad. Y culpar al kirchnerismo por los incendios cordobeses es una irresponsabilidad política, una falsedad descabellada y un defecto moral. Señor Milei, usted es un presidente que la Argentina necesita entero. Usted no es un bonzo. Deje de incendiarse al cuete.
Te puede Interesar
Fuego en las Sierras
Fue luego de que el presidente utilizara su cuenta de X para difundir una fake news.
La Argentina, hoy
El director de la consultora Poliarquía dijo a Cadena 3 que una encuesta muestra un descenso “muy importante” en la aprobación del Presidente. Lo atribuyó a las tarifas, que deslucen la baja inflacionaria, y a nuevas demandas.