Pablo Biró fue nuevamente elegido como miembro del directorio de Aerolíneas Argentinas en una asamblea de accionistas realizada ayer.
La decisión fue tomada por unanimidad por parte de los trabajadores, desafiando así la decisión del Gobierno nacional, que había determinando su expulsión en una Asamblea llevada a cabo en octubre del año pasado, debido a su accionar en el marco del conflicto entre los trabajadores y la empresa.
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Informados al regreso La aerolínea toma medidas contra el sindicalista tras 13 paros que causaron pérdidas millonarias. El Gobierno avanza en el debate sobre la posible privatización de la compañía en el Congreso.
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El Gobierno fundamentó la salida de Biro del directorio de Aerolíneas debido a que el sindicalista había actuado en contra de los intereses de la compañía, promoviendo paros encubiertos y cuestionando la seguridad operativa.
Los organismos oficiales sostuvieron que Biró había impulsado 13 medidas de fuerza a través de las denominadas "asambleas informativas", que provocaron retrasos y cancelaciones masivas de vuelos, afectando a más de 100.000 pasajeros y provocaron pérdidas millonarias.
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Es uno de los tres hinchas de Newells que participaron del brutal crimen que tuvo como víctima a la hincha de Rosario Central, a quién le arrojaron una piedra en la cabeza tras una derrota en el clásico. Lo encontró Interpool.
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No obstante, Biró recurrió a la justicia impugnando la asamblea de Aerolíneas Argentinas y reclamando su restitución al cargo, aunque aún no hay una definición en ese ámbito.
Ante esta situación, los trabajadores decidieron insistir con la designación de Biró, argumentando que, de acuerdo con la Ley de Sociedades, los directores deben ser elegidos y desplazados por los propietarios de las acciones, es decir, los empleados que forman parte del Programa de Propiedad Participada (PPP).
El capital de Aerolíneas está integrado por un 99% de acciones en manos del Estado, y el 1% restante forma parte del Programa de Propiedad Participada (PPP) que incluye a los empleados.