Elecciones en Brasil
14/10/2018 | 07:32 |
Para el candidato del Partido de los Trabajadores su adversario, y favorito en las encuestas para la segunda vuelta, pregona “la cultura de la violación”.
El candidato de izquierda en las elecciones presidenciales de Brasil, Fernando Haddad, acusó este sábado a su adversario de ultraderecha Jair Bolsonaro, favorito en las encuestas para la segunda vuelta del 28 de octubre, de fomentar "la violencia" y "la cultura de la violación".
"Mi adversario fomenta la violencia, incluso la cultura de la violación. Llegó a decirle a una colega del Parlamento que no la violaba porque no lo merecía. ¿Qué señal más violenta que esa para una sociedad?", dijo Haddad en una entrevista exclusiva con la AFP en Sao Paulo.
Bolsonaro, un excapitán del Ejército, que obtuvo en la primera vuelta 46% de los votos, frente a 29% de Haddad, candidato del Partido de los Trabajadores (PT), propone liberalizar el porte de armas para combatir la criminalidad, uno de los temas más sensibles de la campaña.
Una propuesta con limitaciones, según Haddad, quien fue designado candidato del PT en septiembre, después de la impugnación del encarcelado expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
"Nadie apoya a los bandidos, pero las propuestas de Bolsonaro son poquísimas, inclusive en el área en la cual se dice especialista", dijo el exalcalde de Sao Paulo, de 55 años.
"Armar a la población no resolverá nada, la seguridad pública es un servicio que tiene que ser prestado por el Estado y si no lo presta correctamente, hay que adecuarlo", destacó, proponiendo una reforma para que el gobierno federal asuma más responsabilidades, "sobre todo frente al crimen organizado", que a menudo están en manos de los Estados.
Bolsonaro, de 63 años y del Partido Social Liberal (PSL), arrancó con amplia ventaja la campaña de la segunda vuelta, con 58% de los votos, frente a 42% para Haddad, según encuestas.
Obtuvo además un amplio apoyo de las bancadas de la Cámara vinculadas al agronegocio, a las iglesias evangélicas y a los partidarios del porte de armas, lo cual debería facilitarle la gobernabilidad.