"Estamos preocupados y ocupados", dijo un fiscal antidrogas cordobés por Rosario

El fiscal Carlos Cornejo, de Lucha contra el Narcotráfico del Tercer Turno (ciudad de Córdoba) explicó a Radioinforme 3 cómo se trabaja para evitar que el efecto Rosario en materia llegue a la provincia.

"Estamos preocupados y ocupados. Córdoba hace 10 años adhirió a la ley nacional 26.052 para investigar hasta el último eslabón de la cadena del narcotráfico", expresó.

Según indicó, en Córdoba coexisten dos sistemas de lucha contra el narcotráfico, el provincial, para el narcomenudeo, y el de la Justicia federal, para la parte macro.

"Córdoba logró muchas investigaciones, hace ya tres años se venía diciendo que había una expansión del narcotráfico, según las denuncias al 0800, que nos permitieron armar un mapa de puntos e venta", sostuvo.

Si bien no dio detalles sobre las medidas de combate del narcotráfico, señaló que hay "distintas estrategias para abordar las distintas investigaciones" y que en todos los casos se trató de "organizaciones dentro del microtráfico".

A raíz del narcoescándalo en Córdoba, en 2013, la Provincia creó la Fuerza Policial Antinarcotráfico, desde donde se trabajan todas las investigaciones. El organismo coordina también con la Policía Federal y Aeroportuaria, en casos más específicos donde la investigación así lo requiera.

Además, la ley nacional antidrogas prevé un sistema de denuncias anónimas a través de un 0800, una unidad judicial y una fiscalía donde pueden hacer la denuncia con garantía de anonimato.

"En mis siete años como fiscal nunca recibimos ningún reclamo de ninguna persona que haya asumido el compromiso de poner en conocimiento la existencia de un punto de venta", aseguró.

Celulares en las cárceles: ¿un problema en Córdoba?

El fiscal Cornejo aseguró que hasta el momento no hubo requisas de celulares en las cárceles, sin embargo, han desbaratado dos operativos dirigidos desde prisión.

"Intervine en dos investigaciones que nacieron como denuncia de un punto de venta y la investigación permitió saber que se trataba de una organización con personas en la cárcel", explicó.

A raíz del operativo, se realizó un allanamiento y registro de todas las viviendas y lugares de alojamiento en Bower, donde se desarticuló a toda la banda.

"No se secuestraron celulares porque la investigación dio con que usaban los teléfonos del Servicio Penitenciario", aclaró.

Y concluyó: "En estas semanas se está llegando a un acuerdo para darle un abordaje más integral al tema de los celulares, en caso de que alguien logre vulnerar los controles, para lograr el bloqueo".

Entrevista de Miguel Clariá