¿Por qué hay dudas sobre la efectividad de la vacuna rusa?

Jorge Geffner, profesor de inmunología de la UBA e investigador del Conicet planteó sus dudas respecto a la vacuna rusa por la falta de datos respecto a los resultados obtenidos en las pruebas realizadas en aquel país.

“Hay 6 o 7 vacunas en el mundo que son por ejemplo la de la Universidad de Oxford, las sacadas por dos compañías en Estados Unidos y la de China, que empiezan la fase 3 ahora. En la fase 1 se demuestra la seguridad, en la fase 2 que la persona vacunada genera anticuerpos y en la 3 se prueba con decenas de miles de personas vacunadas”, explicó.

En esta última etapa, se demuestra que los vacunados no se van a enfermar y los no vacunados sí. En el caso de la vacuna rusa, Geffner señaló que “puede ser excelente”, pero el problema es que no han publicado sus resultados.

“El resto de los proyectos de vacunas han publicado los resultados de sus fases 1 y 2 y toda la comunidad científica puede verlos, pero Rusia no lo ha hecho”, advirtió.

Es por este motivo que Geffner señaló que al no tener datos de cuántas personas fueron vacunas, qué reacción tuvieron y qué nivel de anticuerpos desarrollaron, no hay constancia de cuán efectiva es.

“Puede ser excelente, pero no lo sabemos y al no saberlo es la precaución que toma en cuenta la Organización Mundial de la Salud”, advirtió.

El mayor problema que indica Geffner es la efectividad: “Necesitamos una vacuna que tenga una efectividad del 70 al 80% para arriba, la rusa por ahí sí la tiene, pero no lo sabemos”.

Es una tradición en la comunidad científica poder acceder a los datos, más si se trata de algo tan preciso como la vacuna, y hoy por hoy no tenemos eso con la vacuna rusa.

“No parece que haya peligro por el diseño de la vacuna, que sí se dejó trascender y que tiene que ver con lo desarrollado en la Universidad de Oxford basado en el empleo de Adenovirus modificado, pero no tenemos los resultados”, remarcó.

Finalmente, y luego de manifestar su escepticismo respecto a la vacuna rusa, el inmunólogo se mostró esperanzado con la llegada de una vacuna para el año que viene.

“Yo soy un poco más esperanzador, muchas de las compañías ya están elaborando stock de millones y millones de vacunas, aun cuando no terminaron la fase 3 porque están con la expectativa de que sean exitosos los resultados”, adelantó.

“Esperemos que lo que prime en la distribución de la vacuna sea un criterio humanitario y no económico o comercial como pasó con una droga importante para el tratamiento del Covid que el conjunto de la producción lo compraron los laboratorios de Estados Unidos”, concluyó.

Entrevista de Miguel Clariá