A 20 años
30/08/2019 | 08:05 | Benjamín Buteler fue uno de los cordobeses que vivió el accidente de Aeroparque. Perdió sus dos piernas pero pudo sobreponerse. "La vida continúa y uno busca ser feliz", dijo a Cadena 3.
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El 31 de agosto de 1999 cambió su vida para siempre y la de los 98 pasajeros y los 5 miembros de la tripulación que abordaron el vuelo 3142 de Líneas Aéreas Privadas Argentinas (LAPA).
Debía partir a las 20:36 desde el Aeroparque Jorge Newbery de la ciudad de Buenos Aires hacia Córdoba. Durante el despegue, la nave no levantó vuelo y fue más allá del aeropuerto, cruzó la Avenida Costanera Rafael Obligado y se prendió fuego.
Por el accidente, murieron 65 personas y sobrevivieron otras 38, entre las que se encuentra Benjamín Buteler, un ingeniero cordobés que por el accidente perdió sus dos piernas.
"La tragedia va conmigo todos los días. La vivo todas las mañanas al ponerme las prótesis para caminar. Es parte de mi vida. Son parte las consecuencias de esa tragedia, no el accidente en sí. De aquel momento en particular no tengo recuerdos aunque sé que estuve consciente porque me lo contó la médica del Same que me auxilió. Yo estaba consciente de mi situación, de lo que había pasado pero no está en mi cabeza. Hice un bloqueo de los recuerdos por los traumas", contó Buteler a Cadena 3 a 20 años de la tragedia.
Al ser consultado si cada 31 de agosto siente algo, Buteler dijo que la fecha sólo le trae a colación el tiempo que ha pasado.
"Son 20 años. Es mucho tiempo y han pasado tantas cosas... Han sido años muy dinámicos. Esto me motiva a pensar en todo lo que ha pasado. Anoche cenaba con gente de mi empresa en Neuquén y hacía un raconto de cómo llegué hasta acá y digo: 'La pucha son muchos'. Y creo que han sido buenos".
En el camino, encontró en otros sobrevivientes como él algunos confidentes. Marité Hereñú compartió con él la misma ambulancia que los trasladó hasta el Hospital Fernández, minutos después del accidente.
"Yo no recuerdo nada pero estaba ahí. Marité me comentó que viajamos en la misma ambulancia y que le hablé en el camino. Le dije que me dolían muchos las piernas. Pero eso no está en mis recuerdos".
Al ser consultado si no guarda rencor a quiénes fallaron en la operación de ese avión, Buteler expresó: "Muchas veces he dicho que no me hago la pregunta: '¿Por qué a mí?' porque no tiene respuesta. Todos los días tomamos decisiones y nos suceden cosas que no podríamos haber previsto. Yo no pude preverlo y me pasó. Me pasó de esa manera y sigo viviendo".
Finalmente, contó que luego de estar internado por un año en Buenos Aires volvió a subir a un avión cuando lo trasladaron a Córdoba.
"Me subieron a un avión sanitario y me mandaron a Córdoba. Cuando subí trataba de levantarme y mirar por la ventanilla. A partir de ahí, todas las semanas me subo a uno. Viajo mucho por mi trabajo y me subo. Una vez que tenés un accidente aéreo -lo cual es muy raro- no podés tener dos. Al menos es casi imposible".
Entrevista de Miguel Clariá.