Dos de cada tres pacientes llegan a terapia antes del testeo

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“Otra explicación posible está relacionada con la falta de importancia que se les da a algunos síntomas. Muchas veces se los soslaya y se pierde un tiempo importante”, añadió.

Según el especialista, los síntomas que hacen sospechar del caso son fiebre (37.5°C o más), tos, dolor de garganta, dificultad respiratoria, falta de olfato o gusto. “Dos síntomas ya son caso sospechoso y, como tal, hay que consultar”, recomendó.

Hojman también se refirió a personas que, aunque reconocen los síntomas, se niegan a consultar. “Hay varios motivos, desde los que van de lo personal hasta personas que viven de determinadas circunstancias y tienen miedo de que les saquen la casa. Hay lugares donde a la gente que ha sido diagnosticada como positiva se la estigmatiza un poco. Y lo otro que pasa, por el manejo epidemiológico de los casos al menos en el AMBA, es que a la gente que se presenta a una institución sanitaria con alguno de estos síntomas, se la hisopa y se la hace esperar en el lugar. Eso es un poco incómodo”, añadió.

Para el infectólogo, el testeo requiere un capítulo aparte. “Hay que ver qué se está testeando y qué no. Una de las cosas que se analiza constantemente es la definición de 'caso'. Hay síntomas como dolor de cabeza y diarrea que se están viendo asociados, pero todavía no lo suficiente como para formar parte de la definición. Tal vez nos estemos quedando cortos con esa definición, tal vez haya que testear un poco más”, reconoció.

Remdesivir

Recientemente, la Agencia Europea del Medicamento anunció que permitirá la venta del primer fármaco para Covid-19. 

Se trata del Remdesivir, un antiviral para pacientes positivos mayores de 12 años y con neumonía, que requieran oxígeno suplementario. 

Consultado al respecto, Hojman opinó: “Estamos viviendo una situación muy peculiar, desconocida para todos. Los pasos que se siguen para que una droga sea aprobada y que tenga una acción demostrada son largos. En este caso, con esta droga o con otras, no hay ninguna prueba fehaciente”.

Y añadió: “Hay un par de casos en los que se vio mejoría y, basado en eso, se liberó la venta de este fármaco que, reitero, es una esperanza, pero no está probado que sirva. Todo esto hay que tomarlo con cautela”.

Entrevista de Fernando Genesir.