Rubinstein: "En el AMBA ya hay una flexibilización de hecho"

El ex ministro de Salud de la Nación, Adolfo Rubinstein, analizó la situación del coronavirus en el AMBA, donde con más de 4 mil casos se decidió continuar avanzando de fase y lo atribuyó a que en el último tiempo la cuarentena no se cumplió como se esperaba.

“El primer mes, la cuarentena se cumplió más estrictamente, luego hubo una suerte de deshilachamiento progresivo y rompimiento y en estas dos últimas semanas, cuando se volvió a la fase 1 con medidas estrictas, el cumplimiento tampoco fue amplio”, explicó.

Uno tiene que asumir que la cuarentena en el último tiempo no se cumplió como deseaba y por eso el aumento de la aceleración de contagios en el AMBA

El ex funcionario advirtió en diálogo con Cadena 3 que “realmente la cuarentena no se cumplió como se pensaba y se ve una curva de contagios que tiene que ver con una flexibilización de hecho” sumado a que “la economía no da más”.

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“Los que viven de la economía informal o son cuentapropistas, tienen negocios o una profesión independiente sin salario fijo, tienen que salir a buscar el mango y acá están los problemas psicosociales y el hartazgo físico”, alertó.

Hay una aceleración de la curva de contagio. La gente sale y hay incumplimiento mientras que por otro lado la economía sigue cerrada y el consumo ha caído porque no hay comercios

Para Rubinstein, esta situación del incumplimiento de la cuarentena agravada por la crisis económica “es lo peor de los dos mundos”. Si bien reconoció que en los primeros meses el cumplimiento fue importante, consideró que “la cuarentena no tuvo el efecto deseado” y las perspectivas a futuro son inciertas.

“No sabemos cómo va a terminar la cosa, pero la decisión de decretar la cuarentena tempranamente cuando recién empezaba la epidemia en Argentina fue muy acertada”, analizó y consideró que en ese momento se tendría que haber aprovechado para salir a buscar el virus e incrementar los testeos.

“Nosotros recién ahora estamos en etapa de maduración del virus”, reflexionó y opinó que “la decisión de flexibilizar y transparentar lo que está pasando y de abrir algunas actividades comerciales es para ver qué ocurre y si se acelera más o no la curva de contagios”.

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“Si uno ve la velocidad de propagación es bastante molesta y si bien la ocupación de camas es un indicador más duro y preocupante, tampoco es muy alta”, señaló.

“Si se transparenta la situación y se abren las actividades veremos qué pasa en las próximas dos semanas”, enfatizó y planteó que hay que “reforzar las medidas de distanciamiento físico, uso de barbijo y evitar la concentración de más de diez personas”.

En cuanto a la vacuna destacó que “los resultados preclínicos o estudios de la primera fase son esperanzadores”, aunque indicó que “hay que esperar los resultados de estos avances a gran escala para saber cuánto protegen y si es una dosis o más”.

“Esto es la primera fase, después hay que producirla y distribuirla a gran escala a miles de millones de personas y no creo que esto ocurra hasta terminado el primer trimestre del año que viene”, concluyó.

Entrevista de Fernando Genesir.