Descubrí Sabores
03/05/2022 | 12:30 | Está en Av. Emilio Olmos 265 y es uno de los únicos restaurantes clásicos de la ciudad que continúa en actividad. Uno de sus platos principales son las milanesas que llaman la atención por su tamaño.
Por Carola Cinto
Fotos César Lanza Castelli
Desde su ubicación hasta su carta están plagadas de historia. El restaurante La Perla, ubicado en Av. Emilio Olmos 265, es uno de los restaurantes más tradicionales de la ciudad de Córdoba. Si bien tuvo varios locales, este fue el primero y el que continúa abierto después de varias crisis y una pandemia de por medio.
Al ingresar al local, la idea de tradicional termina de reafirmarse. Las mesas y las sillas son madera, el aroma a cocina recién encendida y las paredes decoradas con fotos antiguas de diferentes puntos de la ciudad, terminan de trasladar al visitante al corazón de la historia de Córdoba.
"Somos unos de los pocos restaurantes tradicionales que han quedado en Córdoba. Hay muy pocos que tienen la trayectoria de La Perla que sigue tan vigente y que la gente que sigue viniendo", contó a Descubrí Sabores Guillermo Natali, dueño de La Perla.
La Perla tiene una tradición de más de 75 años y hace unos 30 que está en manos de la actual familia. Gran parte de la conservación de las recetas y la experiencia de este bodegón es gracias a los propios empleados que, desde siempre, están en la cocina del lugar.
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La milanesa más grande
Uno de los platos que más se piden en La Perla es la milanesa y esto se debe no sólo a su sabor increíble, sino también a su tamaño. La idea nació de Rosita, una de las primeras cocineras del lugar que empezó a cortar de forma transversal la carne de nalga, que es la que se usa para hacer este plato.
"Ella fue la que lo inició y quedó el legado hasta el día de hoy. Seguimos con esa tradición en el corte y la elaboración artesanal. El pan rallado, los huevos, el ajo, el perejil se seleccionan cuidadosamente", explicó Guillermo.
Los amantes de la milanesa, tienen una infinidad de opciones: desde la clásica con huevos y papas, hasta una cordobesa con salame de Colonia Caroya o una Patagónica con rúcula.
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Una carta que nunca cambia
Al ser un bodegón clásico, la carta prácticamente no cambia. Los fanáticos de las milanesas, podrán siempre comprar milanesas. Lo mismo pasa con los amantes de los platos de pastas y otros clásicos.
La Perla tiene una gastronomía de tipo bodegón con platos tradicionales. "Es una mezcla de cocina italiana y argentina. Hay platos que son emblemáticos como la suprema Maryland o el bundín de pan casero", contó Natale.
Si hay algo que hace de La Perla un lugar único es que conserva algunos platos que ya no pueden encontrarse en otros lugares de Córdoba. Tal es el caso de la zingarella que es una especie de budín de pan con manzanas y bizcochuelo.
La experiencia de La Perla es sencilla y no tiene más que una pretensión: que el visitante vuelva a su casa satisfecho por la abundancia y la calidad de los platos sin haber gastado una fortuna. Una fórmula que es prácticamente infalible al paso del tiempo.
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