Esperanza y frustración: qué atraviesan los jóvenes que quieren irse del país

Un estudio de la Fundación COLSECOR reveló que casi 8 de cada 10 jóvenes se quieren ir del país. Ante este panorama, José Abadi, médico psiquiatra y psicoanalista, explicó en Radioinforme 3, por Cadena 3 Rosario, cómo es el proceso de emigración y qué conlleva.

“Dejar nuestra patria, nuestro lugar de pertenencia, nuestros vínculos tiene sabor a pérdida”, aclaró en un principio.

“Muchas veces los padres se van para que los hijos tengan otro destino para que los chicos vivan en un lugar distinto al viven ellos. Lo hacen con la esperanza de un mañana mejor. Otras veces los chicos sienten que el país se convirtió en una falsa promesa, y eso tiene el color de la mentira. Se van con una sensación distinta, en un trabajo sostuve que no se van, los echan”, apuntó.

En ese sentido, evaluó la situación actual del país y la falta de oportunidades, y sentenció: “Los condenás a una condición pasiva y frustrante, que después se convierte en pesimismo, en desinterés, ansiedad, angustia o en depresión”.

“El que se va piensa que acá no tiene lugar –añadió Abadi-. Pero todo proyecto exige esfuerzo y constancia, los que se van tienen que saber que deberán trabajar intensamente. Nada llega si no se lo busca. El que va pensando que tiene todo servido sentirá que lo engañaron”.

“La promesa incumplida lleva a una frustración que genera hartazgo”, sentenció.