Motocilismo infantil: ¿pueden competir menores en un deporte de riesgo?

La muerte de Lorenzo Somaschini, de 9 años, tras sufrir un accidente el pasado viernes en la 4ª etapa de la Copa Honda Junior 160 en el Autódromo de Interlagos, San Pablo, Brasil, desató un nuevo debate en torno al motociclismo infantil.

Lorenzo no es el primer niño que fallece por practicar este deporte. En 2016, Marco Scaravelli, un niño italiano de 6 años que competía en minimotos sufrió un accidente que le terminó costando la vida cuando entrenaba junto a su padre para una carrera en el Racing Park de Viadana, en la provincia de Mantova en Italia. El accidente le causó heridas de gravedad en brazos y piernas, ni el casco pudo hacer nada para evitar los daños que ocasionaron el fatal desenlace.

En 2017, un joven piloto de 8 años, Alessio Aseglio Gianinet, murió como consecuencia de una caída durante una carrera de minimotos, en el circuito PM Racing de Ferriera di Buttigliera Alta, Italia. El joven se fue al suelo en una de las curvas e impactó su cabeza con el suelo, perdiendo el casco en ese mismo momento.

En 2022 las pistas se cobraron la vida de Mathis Bellon. El joven de 8 años se cayó de su moto durante un entrenamiento en un circuito cerca de Trento (Italia) y tras ser arrollado fue trasladado a un hospital de Montpellier, donde murió. Era integrante de la escuela Race Experience School y competía en la categoría MiniGP 115 en el campeonato francés de minivelocidad. 

Mathis Bellon, tuvo un accidente en un entrenamiento

Andreas Pérez y Marcos Garrido Beltrán tenían 14 años cuando un accidente practicando este deporte les costó la vida. El primero, era de origen catalán y murió en 2018, tras ser arrollado en una carrera del FIM-CEV Repsol, en el mundial Junior de Velocidad en el Circuit de Barcelona-Catalunya. Mientras que, el accidente de Marcos fue un años después, en plena competencia, tras caer de su moto y también ser arrollado por otra, en el circuito de Jerez. Fue durante las pruebas regionales del Supersport 300, en el circuito de Jerez-Ángel Nieto.

Otro de los accidentes más recientes fue el e de Dean Berta Viñales en 2021, tenía 15 años y el accidente fue en las últimas vueltas del Supersport 300 del Mundial de Superbike. Ese año estaba debutando en la categoría de menor cilindrada del campeonato de Superbike.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

Sebastián Porto es expiloto del Mundial de Motociclismo, comenzó su carrera a los 10 años compitiendo en circuito de mini-motociclismo de su ciudad. En diálogo con Cadena 3 admitió que “es un deporte de riesgo”, pero “no extremo”, sino que se trata de una disciplina como el automovilismo donde existe velocidad y adrenalina, e inevitablemente uno queda expuesto a que puedan pasar estas cosas.

“A mí me tocó arrancar a los 10 años, y tiene estas cosas. La parte fea de esta disciplina es que el riego cuando aparece o se excede por alguna determinada manera, termina en estas cosas”, reconoció.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

¿Por qué hay niños en el motociclismo?

Porto señaló que los niños que se inician en el motociclismo es como los que empiezan en el fútbol. “Desde lo familiar, obviamente que ningún padre sabiendo el riesgo que representa esta disciplina lo va a obligar a su hijo o sobrino a practicar un deporte así”, afirmó y dijo que se trata de algo que se realiza por gusto. Según él, generalmente se da en familias donde ya existe una pasión por el motociclismo o automovilismo.

Respecto al inicio temprano en este deporte, explicó: "En Europa, principalmente en España e Italia (los países más fuerte en cuanto a motociclismo y con campeones del mundo), los chicos están subiendo una moto desde los cuatro o cinco años".

“Empiezan en motos chiquitas y en vez de una pelota de fútbol quieren una moto”, reflexionó y añadió: "No es descabellado ni una locura que un chico de 10 años quiera arrancar, es la edad justa".

Además, indicó que a esa edad, con 10 o 12 años comienzan a aparecer los grandes managers y los sponsors. “A esa edad, se sabe si va a ser un fuera de serie o un piloto normal”, indicó.

Por su parte, Guillermo Urdiales, es corredor y tío de la joven promesa Benjamín Urdiales, de cinco años, en diálogo con Cadena 3 Rosario dijo que todos los que se manejan en el mundo del motociclismo o automovilismo saben que “está el riesgo de un accidente fuerte”.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

Y aseguró que los niños comienzan a competir desde temprana edad con “motores limitados” para aprender las reglas del deporte. Además, consideró que se arranca a temprana edad porque “con 18 años no aprendes más”.

"Ningún padre va a obligar al hijo a correr, es algo que nace como al chico que le gusta jugar a la pelota, hay chicos que les gusta correr en moto, correr en karting, y así se inicia, es como todo deporte", remarcó. Y aseguró que “los padres también están en conocimiento cuando firman la autorización para que su hijo compita, saben lo que están firmando”.

En ese sentido, Porta también aclaró que para competir se requiere una licencia deportiva otorgada por la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) y los padres deben dar su consentimiento y firmar para que sus hijos puedan hacerlo.

Por último, reconoció que lo físico puede ser un desafío porque “un chico a esa edad no está desarrollado su cuerpito para afrontar esos golpes”. Pero insistió en que las medidas de seguridad están al día y que hay fatalidades inevitables en todos los deportes.

Marcos Garrido murió en las pistas a los 14 años

Cómo lo viven los padres

Desde su experiencia personal, Porto reveló que sus padres pese al apoyo constante en su carrera “han sufrido horrores”. “No es fácil, sufren mucho, pero cuando uno está arriba de la moto a esa edad lo único que quiere es disfrutar y andar, y sentir la adrenalina”, reveló.

¿Son seguras las pistas?

Porto explicó que en los autódromos se toman todas las medidas de seguridad necesarias, desde los trajes, los cascos y los mismos circuitos. “Puede haber algunos de más peligrosidad, pero generalmente la seguridad está al día en todo eso”, afirmó y reconoció que hay fatalidades que no se pueden evitar.

“Hay licencias deportivas que entrega la FIM (Federación Internacional de Motociclismo) y de ahí se bajan a todas sus federaciones en cada continente y sus respectivos países, autorizando la licencia para que tal piloto pueda competir”, aclaró. Para obtenerla cada piloto joven necesita la autorización de los padres

“Es una disciplina como cualquier otro deporte, lo que pasa es que, bueno, a veces pasan estas cosas que es parte del riesgo de este deporte, que por ahí en otros no ocurren”, lamentó.