"Call center tumbero": impresionante hallazgo en un pabellón de máxima seguridad

Más de una decena de chips, 10 teléfonos celular, seis cargadores, varios cables USB, tres plaquetas y dos cables auriculares fueron incautados en las últimas horas por la Justicia de Córdoba dentro de celdas ubicadas en el Módulo MX2 de la cárcel de Bouwer.

Se trata de uno de los módulos catalogados como de "máxima seguridad" dentro del penal, a raíz de los prontuarios de los presos alojados en esos pabellones.

Según confiaron fuentes con acceso a la investigación, la delación de otro interno activó un operativo que en un principio la fiscalía a cargo de José Mana preparó con una Brigada Civil de la Policía, sin dar participación al Servicio Penitenciario, que recién fue avisado a último momento.

Si bien desde hace tiempo las cárceles de Córdoba se han convertido en un verdadero "call center tumbero", donde los presos ejecutan toda clase de estafas a través de teléfonos celulares que ingresan de manera ilegal, la cantidad de aparatos secuestrados en esta oportunidad han planteado mayores interrogantes en la mesa de la investigación.

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En la fiscalía de Delitos Complejos, a cargo de Enrique Gavier, hace años que se sustancian diversos expedientes sobre la corrupción enquistada dentro del Servicio Penitenciario (SPC). Investigaciones que tienen detenido hace más de un año a quien durante una década y media fue el hombre más fuerte del organigrama carcelario de la provincia, Juan María Bouvier, además de varios de los máximos jefes.

Incluso, uno de los empresarios más fuentes de la provincia, Alicio Dagatti, permanece detenido desde hace unos meses en el marco de la investigación por el ingreso de celulares y drogas escondidos dentro de las medias reses que su frigorífico proveía a las cárceles.

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La caída de Bouvier a fines de 2023 provocó un sismo político que obligó a intervenir al SPC durante seis meses. Ya con la gestión normalizada (Carolina Funes quedó al frente) no dejan de sucederse las noticias que alertan sobre la proliferación de celulares y drogas dentro de los pabellones.

La utilización de los teléfonos por parte de los detenidos no sólo se circunscribe a las estafas telefónicas, rubro delictivo en el que Córdoba se ha transformado en una triste referencia nacional. Sino que estos aparatos también son utilizados, al igual que lo que sucede en Rosario, para encargar homicidios y coordinar otros delitos, según surge de diversas investigaciones aún en curso.

De acuerdo a las fuentes consultadas por Cadena 3, además de los 10 teléfonos, los chips y los otros aparatos electrónicos secuestrados en el allanamiento ejecutado el jueves pasado, en el mismo operativo los policías encontraron dentro del pabellón B3 del MX2 un ladrillo de marihuana de 130 gramos, 69 dosis de cocaína, seis pastillas de psicofármacos, tres "púas" y 216 mil pesos en efectivo.

Gran parte de lo incautado se encontraba escondido dentro de los ductos de ventilación de una de las celdas.