Lo mataron de un balazo cuando fue a comprar cigarrillos

La violencia urbana en la ciudad de Córdoba anotó otra página trágica. Un hombre de 40 años fue asesinado de un balazo en la cabeza cuando iba a comprar cigarrillos en el interior de villa La Lonja, un asentamiento ubicado en la zona sudoeste en cuyos márgenes se vienen repitiendo graves episodios de inseguridad.

Según la investigación que llevan adelante los detectives de la división Homicidios de la Policía, bajo directivas del fiscal Rubén Caro, todo ocurrió en la noche del pasado 12 de noviembre.

Alrededor de las 21, Rubén Héctor Paredes (40), quien vivía cerca de La Lonja, llegó en su camioneta con la que solía hacer fletes y mientras aguardaba a un amigo que lo iba a ayudar con el último traslado del día le avisó a su mujer que se iba a ir a comprar cigarrillos a un quiosco ubicado en el interior del asentamiento.

Camino al negocio, se cruzó con Daniel Montenegro, conocido en el sector como "Cara de Vieja".

Peredes y Montenegro hacía tiempo que tenían diferencias, que ya el segundo solía generar problemas en la zona, sobre todo cuando estaba bajo los efectos de las drogas, según contarían después los testigos que han declarado en la investigación.

Esta vez, no llegaron a discutir: según la reconstrucción judicial, se presume que "Cara de Vieja" extrajo un arma de fuego y casi sin mediar palabras le disparó a Paredes en la cabeza.

El estampido sobresaltó a la mujer del fletero, que corrió a La Lonja y se encontró a su marido moribundo, mientras Montenegro miraba la escena con el arma aún en la mano. Fue entonces que el sospechoso escapó a pie, mientras ella clamaba por auxilio.

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Paredes fue trasladado al Hospital Misericordia, donde los médicos avisaron desde un comienzo que su estado era crítico, ya el que balazo le había ocasionado, entre otras lesiones, la pérdida de masa encefálica.

Mientras tanto, los sabuesos de Homicidios comenzaban a caminar La Lonja. No tardaron en identificar al principal sospechoso, quien ya no estaba en el lugar. Sin embargo, 24 horas después lo detuvieron en ese mismo asentamiento: alguien llamó al 911 y denunció que se estaba produciendo un episodio de violencia familiar; cuando los agentes llegaron, lo encontraron y lo atraparon.

Quedó imputado por homicidio en grado de tentativa. Carátula que quedó en homicidio el lunes último, luego de que se confirmara el deceso de Paredes, quien no sobrevivió a las graves heridas que había sufrido en la cabeza.

En villa La Lonja, la marginalidad es circular: entre los graves índices de desocupación, deserción escolar y carencia de servicios elementales en las viviendas, emergió una violencia e inseguridad que afecta tanto a sus propios vecinos como al resto de una sociedad que sólo la observa desde el tránsito veloz por calle Río Negro.

En julio último, todas estas carencias quedaron al desnudo luego de que se viralizara un video brutal. Un automovilista agobiado por la cantidad de robos que observaba cada noche en los alrededores del asentamiento, se decidió a hacer de investigador: frenó a una prudente distancia, sacó su celular, lo puso en modo cámara y mostró que allí un grupo de jóvenes era capaz de reventarle la cabeza de un cascotazo a un conductor con tal de que frenara para desvalijarlo.

La contundencia de las imágenes llevó a que la Policía y la Justicia mostraran reacción. Durante días, los uniformados coparon el asentamiento mientras se ordenaban allanamientos masivos.

Pero la realidad, a la luz de los últimos acontecimientos, permaneció inalterable.

Más operativos

En ese sentido, el Departamento de Coordinación de Brigadas Civiles de la Policía, junto a Gendarmería, realizó este miércoles una serie de allanamientos dentro de La Lonja, a raíz de diferentes investigaciones penales por robos en ese sector. 

Hubo tres detenidos, entre ellos una joven que tenía pedido de captura por diferentes robos, según trascendió.

Informe de Juan Federico.