Joyas de Francia
08/03/2020 | 10:57 | El periodista de Cadena 3 en España, Adrián Cragnolini, visita este fin de semana ambas ciudad, invitado por los ferrocarriles franceses SNCF y Renfe, en cooperación.
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Montpellier y Lyon, unión de historia y urbanismo sostenible (por Adrián Cragnolini)
El corresponsal de Cadena 3 en España, Adrián Cragnolini, visita este fin de semana las ciudades de Montpellier y Lyon, invitado por los ferrocarriles franceses SNCF y Renfe, en cooperación.
Se trata de una alternativa de transporte más cómoda y sostenible que el avión, que permite viajar a bordo del tren de alta velocidad desde Madrid, Zaragoza o Barcelona a importantes centros urbanos franceses como Perpignan, Narbona, Marsella, Montpellier o Lyon. Los trayectos se realizan en vagones dotados de cómodos asientos, servicio de cafetería y wifi gratuito a bordo.
Montpellier es una de las más antiguas ciudades del sur de Francia, a medio camino entre los Pirineos y la Costa Azul, con un casco histórico medieval perfectamente conservado y donde se llevó uno de los primeros proyectos de peatonalización de toda Europa, hace cuatro décadas.
A pocos kilómetros del Mar Mediterráneo, tiene una población de casi 300 mil habitantes, de los cuales 70 mil son estudiantes y personal docente de universidades, lo que le confiere una vida social muy dinámica.
Aquí radica la facultad de medicina más antigua de Occidente, que este año celebra ocho siglos de su creación. Posee un clima benigno, con muchas horas de sol, un verdadero tesoro para los habitantes del norte europeo que pasan aquí sus vacaciones o bien eligen residir permanentemente.
La Plaza de la Comedia es el sitio más emblemático de Montpellier, un espacio diáfano donde se puede pasear y descansar en alguna de las terrazas de sus bares, mientras se aprecia la fachada de la Ópera, que da sentido al nombre del lugar.
Merecen visitarse los baños judíos de purificación del Siglo XII, el Arco del Triunfo, el moderno barrio de Antígona, la curiosa calle de la Mano de Hierro, y la Catedral. Pero lo mejor es dejarse llevar por sus calles angostas y sinuosas, donde a cada paso puede surgir un punto de interés, como sus trampantojos.
Montpellier es cabecera de un grupo de comarcas vitivinícolas de gran prestigio mundial. Merecen visitarse castillos y viñedos de la zona para apreciar sus paisajes y probar sus afamados vinos.
Lyon, la gran capital de los Alpes
Es la primera Capital Europea del Smart Tourism, un galardón que distingue a las ciudades más innovadoras y responsables en materia de turismo y cuidado del ambiente.
Lyon es desde hace décadas la capital mundial de la gastronomía, con más de 20 restaurantes con estrellas Michelin, incluyendo el local del chef Paul Bocuse, que ha inspirado la creación de la Cité de la Gastronomie, inaugurada a finales del año pasado, una original propuesta para vincular el placer de comer, la nutrición y la salud. Incluye un espacio dedicado a los niños llamado Ñam Ñam.
Entre las innumerables actividades que se pueden desarrollar en una ciudad con un pasado tan poderoso y una economía siempre destacada, nos permitimos acercar un listado de sugerencias: visitar un bouchón, típico restaurante lionés donde probar las especialidades locales o tomar el aperitivo en el Mercado de Les Halles.
Recorrer las orillas del Ródano, ya sea a pie o en bici, y llegar a La Croix-Rousse, antiguo barrio de los trabajadores de la seda, donde podremos adquirir productos artesanales de este sugerente tejido. Tomar el funicular para observar la ciudad a vista de pájaro y al final del trayecto visitar la basílica de Fourviere que desde un monte parece dominar la ciudad.
Cuándo ir
A ambas ciudades, los mejor son las estaciones intermedias, primavera y otoño.
Dónde dormir
En Montpellier: Hotel Le Guilhem, ubicado a pocos pasos al norte de la plaza de la Comedia, palacete rehabilitado, sobrio y tranquilo. Hermoso jardín para tomar el desayuno. www.leguilhem.com.
En Lyon: Hotel Mercure Centre Chateau Perrache, al lado de una de las estaciones ferroviarias más importantes de la ciudad. Distinción y detalles en el servicio y en la ambientación.
Informe de Adrián Cragnolini.