Crimen fuera del boliche
22/01/2020 | 08:14 | El joven fue liberado cuatro días después, ya que hasta el momento no se pudo comprobar su participación. "Lo han dicho como una joda más”, dijo el padre sobre la declaración de los rugbiers.
Pablo Ventura, el último joven que había sido detenido por el crimen de Fernando Báez Sosa (19), recuperó su libertad el martes ya que no se pudo comprobar que haya estado en Villa Gesell.
El padre aseguró que su hijo estaba "muy mal" y "hecho mierda" tras cuatro días preso, y relató cómo fue el reencuentro con él dentro de la unidad: "Nos abrazamos cuando nos vimos y lloramos".
En diálogo con la prensa, José María Ventura aseguró que el joven sufrió "una broma más" por parte de los rugbiers.
"Cada vez que los chicos estos hacían una picardía, una pavada, ellos decían: ‘¿Quién lo hizo? Pablo'”, detalló el hombre ante las cámaras.
De esta manera, se pudo conocer que el joven sufría bullying por parte de los jugadores de rugby, con quien compartía club en Zárate.
“Lo han dicho como una joda más. Pensarían que el chico no estaba muerto”, destacó el padre del liberado frente a la posibilidad de que esta vez se trate de una estrategia para inculpar a su hijo.
También se conoció que Pablo Ventura terminó acusado luego que tres policías comenzaran a rastrillar la casa una vez que los rugbiers fueron detenidos en la misma madrugada del hecho.
Allí encontraron una zapatilla con sangre. “¿De quién es?”, preguntó uno de los policías. “De Pablo”, contestó uno de los detenidos. “Si, de Pablo Ventura”, repitieron otros. Así, el remero que estaba en Zárate era involucrado en el caso.